Este lunes, el consultor político Javier Sánchez Galicia presentó su más reciente libro -el 24 en sus 30 años de carrera-, titulado “El arte de comunicar el gobierno”, una guía de lo que deben hacer los gobiernos para comunicar mejor sus objetivos y acciones, así como para resolver las crisis de la mejor manera.
En la presentación estuvo acompañado del gobernador electo Alejandro Armenta, quien destacó dos puntos clave en esta materia: que informar no es igual que comunicar y que haber obtenido un alto porcentaje de votos no garantiza la gobernabilidad, de ahí la importancia de que un gobierno sepa comunicar.
En estos tiempos en los que en México se vive una etapa histórica en términos de popularidad de un gobierno, es fundamental entender las claves de la comunicación, por lo que esta obra de Sánchez Galicia –experto en la gestión de crisis y quien ha participado en más de 300 campañas en América Latina- es una lectura obligada.
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En el Congreso de Puebla ya está lista una Ley de Alternancia para la gubernatura de Puebla, misma que se pondrá en práctica a partir del 2036.
Esto significa que ya no dependerán del criterio de los partidos políticos o de las autoridades electorales para definir si en una campaña participan mujeres candidatas u hombres, pues ahora se establecerán las reglas en una ley.
Silvia Tanús, impulsora de la iniciativa en la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales, explicó que la propuesta ya avanzó en esta comisión y que se trata de una armonización con la ley electoral federal y de una modificación a los estatutos de los partidos.
De aprobarse en el pleno este dictamen, en 2030 un partido que decida postular a un hombre como candidato, en el 2036 deberá proponer a una mujer y así sucesivamente.
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Como usted sabe, las oficinas de la Junta federal de Conciliación y Arbitraje cerraron en Puebla para ser trasladados los asuntos a Tlaxcala y Oaxaca.
A raíz de que el gobierno del estado intervino, se está en espera de que una autoridad federal venga a Puebla para que se sepa qué pasará finalmente con las oficinas, de tal manera que se sigan atendiendo los asuntos locales y que se combata el rezago de expedientes.
