Una semana duró prófugo el presidente municipal de Acteopan, Álvaro N. tras golpear, atropellar y asesinar intencionalmente a su esposa y presidenta del DIF Municipal, María Elianet.
La tarde de este jueves, la Fiscalía General del Estado reveló los detalles de este feminicidio que surgió a partir de un simple reclamo que ella le expresó debido a que el funcionario conducía en estado de ebriedad, razón por la que él la bajó del auto, la golpeó y la arrolló, provocándole heridas mortales.
Por fortuna, Álvaro N. fue detenido en Morelos, en donde se escondía en una casa que rentó y ahora deberá pagar en prisión el haberle quitado la vida a su esposa y dejar a sus dos hijos en el desamparo. Es además una pena que personas de este nivel gobiernen en Puebla.
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Y hablando de personajes de cuestionable comportamiento, el ex candidato para la presidencia municipal de Chignahuapan, Juan Lira Maldonado, alias “El Moco”, fue citado a comparecer ante la Fiscalía General del Estado.
Este sujeto amenazó la semana pasada al gobernador Sergio Salomón y al gobernador electo, Alejandro Armenta, luego de que el Instituto Electoral del Estado determinó repetir las elecciones en este municipio tras detectar algunas irregularidades, donde supuestamente ganó.
El asunto es que a este personaje se le olvidó que tiene cuentas pendientes con la justicia, por lo que en caso de no presentarse de manera voluntaria, se le girará una orden de aprehensión. A “El Moco” se le ha vinculado nada más ni nada menos que con el huachicol.
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Por fin se pondrá orden en los antros, luego de que el Congreso de Puebla aprobó una reforma que limita la venta y consumo de bebidas alcohólicas debido a varios casos de abuso que han ocurrido en los alrededores de estos negocios.
Los antros ya no podrán vender alcohol después de las 2:30, se elimina la figura del cadenero y están obligados a colocar cámaras de seguridad dentro y fuera, sin que haya puntos ciegos.
Lo más importante y, que ojalá sí se aplique, es que quien viole estas normas será sancionado con 3 y hasta 9 años de prisión. Bravo.
