Montserrat Ramiro, experta en temas de energía, conversó con columnistas de EL UNIVERSAL, moderados por el Director Editorial General, David Aponte, sobre la iniciativa de reforma eléctrica que el presidente Andrés Manuel López Obrador mandó a la Cámara de Diputados para su discusión y aprobación.
Durante la charla, Montserrat Ramiro afirmó que el objetivo de la reforma es que “la CFE sea la única empresa constitucionalmente autorizada para generar y suministrar energía eléctrica” en el país por lo que expresó y coincidió con los panelistas Héctor de Mauleón, Valeria Moy y Maite Azuela que “el único imperativo que tiene esta reforma es de control político”.
Señaló que en lo que va del sexenio no se ha cumplido la promesa de pagar menos por la luz y que ante el debate sobre soberanía, "la soberanía es prender la luz, que no se quemen tus aparatos y pagarla a un precio competitivo".
En tanto se habló de que la razón por la que es difícil hablar sobre beneficios objetivos de la reforma es la argumentación técnica que engloba. Y se mencionaron las diferencias entre el suministro básico y tarifas de alto consumo o temas como producción, transmisión y subsidio de la energía eléctrica y cómo se reflejan en el recibo de luz.
En este sentido, se habló de cómo el presidente ha hablado de que no es posible que una tienda Oxxo pague menos por consumo de energía eléctrica que un hogar de clase popular, y dice que con la reforma busca un equilibrio en la producción y costos de la energía eléctrica dejando el 54% de la generación de energía eléctrica a la CFE y el 46 privados para que la comisión pueda salir adelante y no compre energía a precios elevados a particulares.
Sin embargo, en el sector privado no se paga por la transmisión de la energía eléctrica que se consume, pues hay un subsidio, así “mientras más energía produzca la CFE, más dinero va a perder porque tiene una mala infraestructura”.
Al respecto Maite Azuela mencionó que, en torno a la discusión sobre la reforma, se ha comenzado a “hablar de soberanía energética” y comparar con modelos extranjeros, ante lo que Montserrat Ramiro aseguró que “no hay un planteamiento real de la electricidad sino de lo que significa la CFE en el imaginario colectivo” y agregó que "soberanía es pagar la luz a precio competitivo".
David Aponte, director General Editorial de EL UNIVERSAL, preguntó a Ramiro qué ve, más allá del control político detrás de la iniciativa de AMLO, ante lo que respondió que no hace sentido económico y social exigir a la CFE que se encargue de la generación de energía para todo el país.
“Este ejercicio va a salir mal y eso le va a costar a alguien en términos políticos” y por una mala interpretación de lo que es la electricidad y lo que representa para un país como México en términos de finanzas y su desarrollo futuro México perderá tiempo en la transición a una renovación eléctrica.
Por su parte, Héctor de Mauleón cuestionó si esta reforma es, en verdad, necesaria a lo que la especialista aseguró que“no es necesaria, y al contrario nos hace mal a los mexicanos”, pero aceptó que hay muchas cosas que cambiar en el sistema regulatorio como “invertir decididamente desde el estado en transmisión y distribución”.
Y agregó que invertir en transmisión y distribución es indispensable en un mundo "donde los sistemas eléctricos están mudando a energías renovables" por lo que es fundamental tener un mallado de la red para mejorar la competitividad y acceder a nuevas cadenas de valor como el almacenamiento eléctrico.
"México no puede ir en sentido contrario a la renovación eléctrica, lo lamentable es que con esta reforma México pierda tiempo en esa transición", aseguró.