“Me preocupa que salgan antes”: Jazmín
Prefiere que su hijo permanezca en el plantel donde los maestros lo cuidan
Jazmín se emplea desde hace más de 15 años como trabajadora doméstica. Su jornada comienza a las nueve de la mañana y concluye a las nueve y media de la noche. Cuenta que por cada casa en la que hace el aseo, gana de 200 a 300 pesos. Es mamá de Moisés, quien cursa el quinto año de primaria.
“Imagínese que se acabe este programa [Escuelas de Tiempo Completo] y salgan a las 12 y media de la tarde. Sería preocupante y no podría dejarlo solo porque se saldría a las calles y como dicen, ‘la ociosidad es la madre de todos los vicios’. Para mí es mucho mejor que salga a las cuatro de la tarde. Tiene sus talleres y los maestros siempre están al pendiente de ellos”, expresa.
“No queremos que nos den becas”: María Guadalupe
Opina que gobierno debe dar educación y empleos antes que regalar dinero
María Guadalupe, licenciada en Informática, asegura que los recursos que promete el gobierno federal a los padres de familia que tienen a hijos en Escuelas de Tiempo Completo serían insuficientes para alimentarlos bien y garantizar su aprendizaje.
La mujer llega al plantel de sus hijos, Paula y Diego, a las 7:30 de la mañana. Espera que sean recibidos para dirigirse a la empresa en la que trabaja, donde entra a las ocho y sale a las seis de la tarde.
“Esta medida se toma a la ligera”: Óscar
Lamenta que menores perderán horas de estudio y un espacio seguro
Óscar es chofer en una empresa de autotransporte. Su esposa es enfermera y en algunas ocasiones se da tiempo para llevar a su hija Frida a la escuela primaria, donde también cuentan con los servicios de una sicóloga.
Consultado sobre la eliminación del Programa de Escuelas de Tiempo Completo (PETC), externa su desacuerdo de que el gobierno federal distribuya recursos a los padres de familia que tienen a sus hijos en estos planteles.
“Eso no sirve ni servirá de nada. Este gobierno sólo piensa en becas y en apoyos monetarios, pero cómo compensar las horas de aprendizaje que nuestros hijos e hijas perderían si acortan el horario escolar. ¿Piensan que uno como padre de familia tiene los recursos para pagar clases externas? Muchas, si no es que la mayoría de las familias, vivimos al día”, comenta.
“¿Qué pasará con las familias pobres?”: Sofía
“Ese apoyo no será suficiente”: Araceli
Dice que otorgar recursos no es una solución a los problemas del país
Araceli es médico y su hija Kiara asiste desde primer año a la primaria Profesor Francisco de la Maza Cuadra, en la alcaldía Gustavo A. Madero. Ahí, las niñas y niños reciben el desayuno y la comida.
Araceli dice que está contenta con las Escuelas de Tiempo Completo, pues además de los talleres e inglés que se imparten, realizan actividades, como basquetbol, voleibol y futbol.
“Esto es de mucho provecho para los niños. Hacen ejercicio y no están en casa pegados al videojuego, la tablet o el celular. Kiara está feliz en esta escuela y estoy informándome para que en la secundaria también acuda a una escuela de tiempo completo”, dice.
Araceli no está muy convencida con el argumento que dio esta semana la SEP en el sentido de que a los padres y madres de familia que tengan inscritos a sus hijos e hijas en ese tipo de planteles, se les apoyará con recursos directos, sin intermediarios.
“Creo que ese apoyo será insuficiente porque habrá quien requiera que su hijo quede en manos de una cuidadora porque no los puedes dejar con cualquier persona.
“Nos sirve que el niño esté aquí, activo, aprendiendo, que no sea estar en casas ajenas, en la calle o perdiendo el tiempo”, refiere.
Está convencida de que otorgar becas no es la vía para mejorar los problemas del país, “porque por eso ha aumentado el vandalismo, el uso de las drogas; porque es muy padre estirar la mano y recibir, pero la gente no se está esforzando, no está haciendo nada por ganarse la vida”.
Araceli
“Esto es de mucho provecho para los niños. Hacen ejercicio y no están en casa pegados al videojuego, la tablet o el celular”
Araceli está satisfecha con la educación que recibe su hija.