La detención del exgobernador de Nuevo León se debió a un presunto desvío de recursos para la recolección de firmas, caso que ha sido bautizado como “Broncofirmas”.
De acuerdo con el actual gobernador Samuel García Sepúlveda, un total de 571 funcionarios estatales de todos los niveles solicitaban en horas laborales las firmas ciudadanas que exigía el Instituto Nacional Electoral (INE) para que “El Bronco” fuera candidato a la Presidencia de la República en 2018.
La denuncia, del entonces senador, precisó que los funcionarios estatales de la entidad utilizaron recursos del Estado para solicitar las firmas que ayudarían al "Bronco" a obtener su candidatura independiente.