Como en ediciones pasadas de EL Buen Fin 2021 las tiendas de autoservicio, departamentales, especializadas o de cualquier tipo deberán de pagar por sus errores tal y como los obligó a hacerlo la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) en años pasados, cuando se vendieron pantallas en 3 pesos o en 10 pesos, por poner un punto en lugar de una coma, o también por una promoción que no puso límite y un cliente compró todos los whiskys de la tienda.
Por eso hay que abrir los ojos, porque cualquier oferta que se encuentre deberán cumplirla aún y cuando sean errores, porque la Profeco estará pendiente de que se cumpla con descuentos, rebajas y promociones durante los siete días que durará El Buen Fin 2021, del 10 al 16 de noviembre.
En las ediciones pasadas de dicho evento de ofertas, los errores de las tiendas salieron muy caros, por ejemplo, en el Buen Fin del 2019 se vendió una pantalla en 3 pesos al estar mal colocada una coma.
Pero como se puso la leyenda de que solamente se venderían las pantallas en exhibición, el gerente rifó el único producto que se encontró en el anaquel.
En la edición de El Buen Fin 2020 un consumidor aprovechó un error de una tienda Soriana en Guadalajara, Jalisco, para exigir que le vendieran todas las botellas de whisky en existencia, es decir las 2 mil 340 botellas de whisky Buchanans con la promoción de 3 por 2.
Otro de los errores se presentó en el Walmart de Pachuca, Hidalgo, en donde se tuvieron que vender 8 pantallas en mil 581 pesos cada una, en lugar de 9 mil 488 pesos.
El error estuvo en que se ofreció rebajar el precio de 13 mil 999 a 9 mil 488 pesos, pero si se compraba a 24 meses el precio sería de mil 581 pesos.
También en tiendas de la Ciudad de México por un error se vendieron 7 pantallas y 9 consolas de videojuegos en 2 mil 498 pesos en lugar de 24 mil pesos cada una.
En Bodega Aurrera Tecámac, en el Estado de México, se vendió una pantalla de televisión en 10.999 pesos, cuando el valor real fue de 10 mil 999, pero el precio cambió al ponerse un punto en lugar de una coma.
Lee también: Desde acoso a feminicidios, lo que sufren empleadas en la Riviera Maya
vcr/rdmd