Al inicio del tercer trimestre del año, el comercio exterior del país dio señales de recuperación con crecimientos mensuales de las exportaciones e importaciones durante julio, lo que arrojó un saldo comercial deficitario, luego de ligar tres meses en terreno positivo, de acuerdo con los datos publicados por el Inegi.

Las importaciones totales del país registraron un avance mensual de 4.88%, que se derivó de alzas de 4.51% en las no petroleras y de 7.94% en las petroleras. Por tipo de bien, se presentaron aumentos mensuales de 0.33% en las importaciones de bienes de consumo, de 5.54% en las de bienes de uso intermedio y de 5.76% en las de bienes de capital.

Buena parte del alza de las compras al exterior respondió a la mejora mensual en las importaciones de bienes intermedios, que están asociados con los procesos productivos del país y que podría sugerir una mejora para las manufacturas en el corto plazo, explicó Daniel Arias, analista económico de Monex.

Por su parte, las exportaciones totales de mercancías reportaron un ascenso mensual de 1.47% en julio pasado, el cual fue resultado de crecimientos de 1.35% en las no petroleras y de 3.27% en las petroleras. Pese a lo anterior, las ventas al exterior se siguen rezagando en gran medida por los problemas con las cadenas globales de suministros que afectan particularmente al sector automotriz, advirtió Daniel Arias.

Las exportaciones automotrices tuvieron su segundo descenso consecutivo y el cuarto en lo que va del año, lo que ha resultado en un deterioro importante, pues su peso en las ventas foráneas manufactureras ha pasado de 36.6% en enero a 30.8% en julio.

Resultado del comportamiento de las exportaciones e importaciones en julio, la balanza comercial rompió con la racha de tres superávits consecutivos y en su lugar registró un déficit de 4 mil 63 millones de dólares, el más elevado en los últimos 30 meses y también el más alto para un mes de julio desde 1991.

Los datos de la balanza comercial de julio son una señal alentadora para la actividad económica al inicio del tercer trimestre de 2021, sobre todo en lo que concierne al consumo interno, comentó Arias, quien destacó el robusto crecimiento del volumen total del comercio, sobre todo ante la debacle del sector automotriz, pues ello indica que una vez que se normalicen las condiciones, el potencial de crecimiento puede ser muy amplio.

Las afectaciones en la oferta global de insumos serán de carácter temporal y se prevé que éstas comiencen a desvanecerse cuando el impacto de la pandemia se modere, estimó Ricardo Aguilar, analista económico de Invex.

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