Uno de los episodios más significativos de la defensa de la patria se vivió en el Castillo de Chapultepec el 13 de septiembre de 1847, y dio paso a la inmortalización de seis cadetes, uno de ellos poblano, que, a la postre, forman parte de la historia como los Niños Héroes.
Vicente Suárez Ortega nació en Xochitlán el 13 de abril de 1834, por lo que, al morir en la Batalla de Chapultepec, tenía alrededor de 13 años.
De acuerdo con registros oficiales, Vicente Suárez fue bautizado en la parroquia de San José. En octubre de 1845, ingresó al Colegio Militar a la edad de 12 años y fue incorporado a la Segunda Compañía de Cadetes.
En el Castillo de Chapultepec, desempeñaba el cargo de centinela, por lo que fue uno de los primeros en caer abatido. Su desempeño en defensa de la patria, en el que ofrendó su vida, ha sido reconocido a lo largo de la historia. Algunas colonias, parques y vialidades del estado llevan su nombre.
El municipio donde nació lleva su nombre: Xochitlán de Vicente Suárez. Está a un costado de las instalaciones del Centro Escolar “Niños Héroes de Chapultepec” y existen por lo menos 20 escuelas más en la entidad que llevan el nombre de Vicente Suárez.
La batalla del Castillo de Chapultepec se dio en el marco de la invasión de tropas estadounidenses, quienes, al ingresar a la ciudad capital, decidieron tomar como punto estratégico ese inmueble. La figura de los Niños Héroes fue inmortalizada en un monumento que se ubica a un costado del cerro de Chapultepec y, a lo largo de la historia, ha sido reconocida de diversas formas.
Incluso sus figuras se emitieron en algunos billetes y se acuñó una moneda en su honor.
En la ciudad de Puebla, los Niños Héroes cuentan con un monumento ubicado sobre el Bulevar 5 de Mayo, en las inmediaciones del Centro Escolar “Niños Héroes de Chapultepec”.