El uso de helicópteros por parte de funcionarios públicos no es una actividad nueva ni privativa de Puebla.

Se trata de una acción de corte nacional, de la que, si bien no se habla mucho, se mantiene en el plano federal, como lo demuestran por ejemplo los diversos vuelos de supervisión de las obras de construcción del Tren Maya que ha realizado el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Pero esa práctica no está alejada ni exenta de accidentes y por supuesto de desgracias.

Los helicopterazos de Puebla

La entidad poblana, además del percance en el que perdieron la vida la gobernadora Martha Érika Alonso y el senador Rafael Moreno Valle, junto con la tripulación del helicóptero Agusta y un acompañante, registra en la historia moderna otros accidentes.

En la parte final del gobierno de Alfredo Toxqui Fernández de Lara, durante una gira del mandatario estatal en el municipio de Huauchinango, mientras presidía un evento, los pilotos decidieron reabastecer combustible.

El helicóptero cayó y la tripulación murió.

De acuerdo con registros periodísticos, durante la gestión de Manuel Bartlett Diaz como gobernador se registraron dos sucesos.

En el año de 1993, un accidente de helicóptero, en Izúcar de Matamoros, terminó con un saldo de dos muertos.

En 1998, se reportó otro percance en el que por fortuna no se registraron víctimas mortales.

Durante la administración de Melquíades Morales Flores, en el año 2001 se registró un percance en el municipio de Santa Rita Tlahuapan, en el que no hubo víctimas mortales. Se trató de un helicóptero Bell 412.

En esa ocasión en el helicóptero viajaban el gobernador Melquíades Morales Flores, el expresidente de la Gran Comisión del Congreso del Estado, Moisés Carrasco Malpica; el comandante de la 25 Zona Militar, Sergio Ayón Rodríguez; y el secretario de Educación Pública, Amado Camarillo Sánchez.

En la administración de Mario Marín, en el año 2008 se registró un accidente aéreo en el municipio de Tepango de Rodríguez con un saldo rojo de ocho víctimas.

En el helicóptero viajaban, junto con otras seis personas, la presidenta del voluntariado de la Secretaría de Gobierno estatal, Patricia Rosano Maldonado; y el director de Participación Ciudadana, Carlos Lesier Gamboa.

Críticas al gobierno de Puebla por los altos costos de las aeronaves

El gobernador Guillermo Jiménez Morales fue objeto de críticas, cuando optó por adquirir un Bell de seis plazas, por su alto costo y el monto que requería su mantenimiento.

En 1982, como consecuencia de la devaluación, el helicóptero Bell fue vendido.

Durante la gestión del gobernador Manuel Bartlett Díaz adquirió un Eurocopter Dauphin, que se accidentó un año después. Y fue sustituido por un Bell 412, que llegó a Puebla en calidad de préstamo por parte de la administración federal.

Al inicio de su gestión, Rafael Moreno Valle fue criticado por la adquisición de un helicóptero Agusta.

Incluso se acusó opacidad al no hacer públicos datos como monto, marca, modelo y fecha de adquisición de la aeronave, lo que llevó a algunos medios a acudir a la entonces Comisión de Acceso a la Información Pública (CAIP).

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