La riqueza gastronómica de Puebla no tiene comparación y es basta en cada región del estado, lo que también hace únicos a sus pueblos con sus costumbres y tradiciones.
En el municipio de Ahuacatlán, ubicado en la Sierra Norte de Puebla, desde el 2019 se celebra el Festival del Tamal de Puñete, un producto que pocas personas conocen el nombre, pero que muchos degustan.
Ahuacatlán limita al norte con los municipios de Tlapacoyan y San Felipe Tepatlán, al sur con Tepetzintla, al oeste con Amixtlán y Tepango de Rodríguez y al poniente con los municipios de Chiconcuautla y Zacatlán.
Su población es de asentamientos náhuatl y totonaco, en los primeros días de febrero celebran el Festival del Tamal de Puñete, como parte de las fiestas de la Virgen de la Candelaria y que de acuerdo con algunas tradiciones es el periodo en que deben de pagar los tamales aquellos que en la rosca de reyes encontraron al Niño Dios.
Los habitantes de Ahuacatlán, con anticipación, alistan los ingredientes para preparar los tamales de puñete, los cuales reciben ese nombre porque se forman con el puño de la mano.
Para este antojito, que tiene antecedentes prehispánicos, la masa que se emplea es muy parecida a la que se utiliza para las tortillas, porque no es tan líquida como la que usan los tamaleros de la zona centro del país.
Además, la masa también tiene pequeños trozos de hierbas como hoja santa o epazote, que se notan en la masa, pero que resaltan su sabor al momento de la cocción.
Una vez que tienen la masa preparada con otros ingredientes, así como el relleno, que puede ser de carne, queso o rajas, se inicia el proceso para hacerlos, envolverlos y cocinarlos.
El primer paso es tomar un poco de masa y tortillarla para obtener una pequeña tortilla que se coloca sobre el puño de la mano a fin de darle forma de un pequeño cuenco para poder rellenar.
Una vez que queda la forma de una pequeña cazuela se coloca el pedazo de carne y se cubre con mole, posteriormente se unen los laterales para cerrar el tamal y no se salga el relleno.
Se procede a retirar el excedente de masa y habrá quedado un molotito, el cual se deposita en la hoja de tamal, listo para envolverlo y llevarlo a cocción.
Para servir, hay quienes lo degustan solo o junto a un plato de mole y utilizan el tamal como cuchara para comer al mismo tiempo tamal y guisado.
El tamal de puñete también se conoce en el municipio de Huauchinango, donde hay quienes lo rellenan de frijoles con adobo y la masa para elaborarlos son a base de maíz o maíz azul.
En Ahuacatlán, organizar el Festival del Tamal de Puñete tiene como propósito promover este producto representativo de la Sierra Norte y que pocas personas ajenas a la localidad conocen, pues las familias de la localidad los preparan para celebrar un cumpleaños, una graduación, un evento especial como bodas o bautizos o durante la fiesta patronal que realizan en junio.
Si vas de visita a Ahuacatlán, te recomendamos conocer su parroquia dedicada a San Juan Bautista y que data del siglo XVII, pasearte por su cascada Akuaticpak, escondida entre árboles y el río Ixquihuacan, así como disfrutar de la belleza natural de la localidad.
