El primer elemento que deben considerar los interesados en obtener una licencia de manejo para vehículos privados en Puebla es que deberán someterse a un examen teórico-práctico, que tiene un esquema diferente al que se aplica en el caso de una licencia comercial.
En la parte teórica, se evalúa el conocimiento del reglamento de tránsito, la señalética vial, las normas de desplazamiento vehicular y las relativas a seguridad vial, además de elementos relacionados con el funcionamiento general de un vehículo y la forma en la que operan los semáforos.
En la parte teórica se aplican los reactivos con respuestas de opción múltiple, que ayudan a quien conoce la información a seleccionar la opción adecuada. Dado que se trata de un banco amplio de reactivos, las preguntas varían y no siempre son las mismas, ya que el sistema está programado para seleccionar de manera aleatoria las preguntas que deberá responder cada persona.
Por ejemplo, pueden preguntar: ¿qué significa una luz roja intermitente en un semáforo?, ¿cuál es la velocidad permitida en una zona escolar?, ¿qué hacer ante la presencia de un vehículo de emergencia? o ¿en qué zona debe detenerse el vehículo ante un alto?
Además, se evaluará el significado de algunas señales o anuncios en el camino, así como los elementos básicos de emergencia que debe tener todo vehículo.
El examen práctico, por el momento, será algo novedoso, ya que a partir de 2025 deberá realizarse mediante simuladores, cuyas características visuales y técnicas aún no son del dominio público.
El examen teórico-práctico para obtener la licencia de automovilista será aplicado por la Secretaría de Movilidad y Transporte (SMT) o por terceros autorizados por esa dependencia, según el decreto publicado el 15 de julio en el Periódico Oficial del Estado.
Los conductores de transporte público, servicio ejecutivo, transporte mercantil y grúas deberán aprobar el examen teórico-práctico, así como una valoración psicofísica integral que constará de un examen toxicológico y psicométrico con vigencia de un año.
