El uso de las Tecnologías de la Información, pero sobre todo de las redes sociales, representa un evidente beneficio en el plano de la comunicación y la interacción social, pero también conlleva riesgos.
Entre ellos, la violencia digital que afecta a no pocos usuarios.
Este tipo de violencia es definida como toda acción por la que se expone, distribuye, difunde, exhibe, transmite, comercialice, oferte, intercambie o comparta imágenes, audios o videos reales o simulados de contenido íntimo sexual de una persona sin su consentimiento, sin su aprobación o sin su autorización y que le cause daño psicológico, emocional, en cualquier ámbito de su vida privada o en su imagen propia.
Debido a la magnitud del tema, el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) desarrolló un Código de Ética para la prevención de la Violencia Digital contra las Mujeres.
En torno a la violencia digital se han creado conceptos como el ciberbullying o ciberacoso, trolear, stalking, grooming, shaming, doxing y sexting.
Las personas más vulnerables a la violencia digital
En términos generales, las mujeres y menores de edad son los sectores más vulnerables en la materia.
En diciembre de 2022, se llevó a cabo la presentación del “Informe Violencia Digital” en México.
En el evento, Olimpia Coral Melo, activista y creadora de la Ley Olimpia, señaló que el estado de Puebla ocupó la cuarta posición nacional por registrar más casos de violencia digital, con 65.
Precisó que, en la mayoría de los casos, se difundió contenido íntimo sin consentimiento, las mujeres sufrieron amenazas para difundir sus imágenes, fueron víctimas de hostigamiento/acoso sexual, sextorsión o distribución de pornografía infantil.
Y destacó que ese tipo de violencia se disparó con el inicio la pandemia por Covid-19.
En abril de 2021 se presentó el informe “Acercamiento a la violencia digital contra las mujeres en Puebla”, realizado por el Observatorio de Violencia de Género en Medios de Comunicación (Ovigem) y el Consejo Ciudadano de Seguridad y Justicia del Estado de Puebla (CCSJP), en el que se señaló que en el 91 por ciento de las Carpetas de Investigación (CDI) abiertas por el delito de violación a la intimidad sexual, que es como está tipificada la violencia digital, las víctimas son mujeres.
¿Cómo se castiga la violencia digital?
La violencia digital se puede denunciar en una agencia de Ministerio Público o en su caso, ante la Policía Cibernética, en primera instancia.
Se sanciona mediante la Ley Olimpia que contempla sanciones de tres a seis años de prisión para quienes efectúen estas acciones y multas que van de 500 a 1,000 Unidades de Medida y Actualización (UMA).