Se estima que de un total de 50.5 millones de mujeres de 15 años y más que hay en México, 70.1 por ciento ha experimentado, al menos, una situación de violencia a lo largo de la vida, informó Graciela Márquez Colín, directora general del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Lo anterior, durante la presentación de los resultados de la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH) 2021, que se llevó a cabo del 4 de octubre al 30 de noviembre de 2021.
El objetivo de la ENDIREH es generar información estadística con representatividad nacional y para cada uno de los estados y estimar así la prevalencia y gravedad de la violencia que han enfrentado las mujeres de 15 años y más.
Se analizaron los tipos de violencia: psicológica, física, sexual, económica o patrimonial, así como en los ámbitos de ocurrencia: escolar, laboral, comunitario, familiar y de pareja.
En el caso de Puebla, Alejandra Ríos Cázares, directora adjunta de Desarrollo, Análisis e Indicadores del INEGI, dio a conocer que en la entidad el 70.8 por ciento de las mujeres de 15 años y más dijeron haber sufrido algún tipo de violencia a lo largo de la vida.
Estos dígitos colocan a la entidad ligeramente arriba de la prevalencia nacional que es de 70.1 por ciento.
Las entidades con mayor prevalencia son Estado de México con 78.7 por ciento, Ciudad de México con 76.2 por ciento y Querétaro con 75.2 por ciento.
En el caso de violencia de pareja, 44 de 100 poblanas de 15 años y más dijeron que vivieron violencia por parte de su pareja a lo largo de la relación actual o última, lo que coloca al estado muy por arriba de la media nacional que es de 39.9 por ciento.
Puebla se ubica en el cuarto sitio entre las entidades con mayor prevalencia en este tipo de violencia, junto con entidades como Guerrero con 47.6 por ciento, Hidalgo con 45.6 y Yucatán con 45.1 por ciento.
El principal tipo de violencia que las poblanas sufrieron por parte de sus parejas fue la de tipo físico o sexual, pero el porcentaje en el caso de denuncias es muy bajo al registrar apenas el 13.1 por ciento.
En tanto que la denuncia por violencia física o sexual en el ámbito comunitario es apenas de 4.3 por ciento. En ambos casos, la principal razón por la cual dijeron que no denunciaron es la normalización de la violencia.
Respecto a la violencia en las escuelas, Puebla registró 31.7 por ciento de prevalencia, cifra por debajo de la media nacional que es de 32.3 por ciento, siendo Querétaro, con 40.3 por ciento, la entidad con el mayor porcentaje de prevalencia en el país.
Los principales agresores en los últimos 12 meses se identificaron, con un 46.2 por ciento a un compañero, seguido de maestro con 16.6 por ciento, persona desconocida de la escuela con 16.2 por ciento, compañera con un 8.9 por ciento y otra persona de la escuela con 6.2 por ciento.
En el caso de la violencia en el ámbito laboral, el estudio del INEGI reveló que 26.1 por ciento de las poblanas de 15 años y más que se encuentran en la vida laboral reportaron ser víctimas de violencia en el trabajo.
Las principales personas agresoras fueron compañeras o compañeros de trabajo, seguido del patrón o jefe, después el supervisor, capataz o coordinador (a), en cuarto sitio el cliente, después el gerente o directivo, seguido de personal desconocido del trabajo, otra persona del trabajo y al último un familiar del patrón.
También 44.9 por ciento de las poblanas de 15 años y más dijeron sufrir algún tipo de violencia en el ámbito comunitario a lo largo de la vida.
La Ciudad de México, Estado de México y Querétaro fueron las entidades que registraron el mayor número de prevalencia de violencia con porcentajes de 60.9, 58.5 y 51.8 por ciento, respectivamente.
Las principales personas agresoras fueron un desconocido, seguido de un conocido, un vecino, un amigo, el conductor del transporte público, agente de seguridad o policía, sacerdote o ministros de culto y en el último sitio un militar o marino.
El estudio también tomó en cuenta la violencia en el ámbito familiar, de octubre de 2020 a octubre 2021, siendo las y los hermanos quienes ejercen la mayor violencia de tipo psicológica sobre las mujeres en un 23.0 por ciento.
En segundo lugar es la violencia física con 37.0 por ciento ejercida también por un hermano o hermana, la violencia sexual con 25.3 por ciento recae por parte de un primo o prima, y la violencia patrimonial con 21.5 por ciento por parte del padre hacia las mujeres de 15 años y más.
Por la pandemia, a nivel nacional 14.8 por ciento de las mujeres separadas, divorciadas o viudas reportaron un incremento o que se iniciaron los conflictos en la relación de pareja antes y durante la contingencia sanitaria por Covid-19.
En el caso de las mujeres solteras, 8.0 por ciento reportó el incremento de los conflictos y 5.3 por ciento fue en el caso de las mujeres casadas o en unión libre.
Graciela Márquez, directora general del INEGI, destacó que a nivel nacional la violencia psicológica fue la de mayor prevalencia (51.6 por ciento), seguida de la violencia sexual (49.7 por ciento), violencia física con 34.7, y violencia económica, patrimonial y/o discriminación con un 27.4 por ciento.
La violencia contra las mujeres en el país se presentó en mayor porcentaje en el ámbito comunitario (22.4 por ciento), seguido del laboral (20.8 por ciento).