La Ley castiga a las personas que andan de ‘cuscas’ con los cadáveres, en los panteones de México.
En el Código Penal Federal, el delito está catalogado contra la ley general de salud en el supuesto de obtención ilícita de un cadáver, infracciones a las leyes y reglamentos sobre inhumaciones y exhumaciones.
De acuerdo al artículo 280, se impondrá prisión de tres días a dos años con una multa de 30 a 90 días:
⁃ Al que oculte, destruya o sepulte un cadáver o un feto humano sin la orden de la autoridad que deba darla o sin los requisitos que exijan los Códigos Civil y Sanitario o leyes especiales.
⁃ Al que oculte, destruya, o sin la licencia correspondiente sepulte el cadáver de una persona, siempre que la muerte haya sido a consecuencia de golpes, heridas u otras lesiones, si el reo sabía esa circunstancia. En este caso no se aplicará sanción a los ascendientes o descendientes, cónyuge o hermanos del responsable del homicidio.
⁃ Al que exhume un cadáver sin los requisitos legales o con violación de derechos.
En el artículo 280 bis se establece que se impondrá pena de cinco a ocho años de prisión y de 500 a mil días multa:
⁃ A quien incinere, sepulte, desintegre o destruya total o parcial el cadáver o restos humanos de una persona no identificada, sin autorización de las autoridades competentes en la materia.
⁃ Al que viole un túmulo, un sepulcro, una sepultura o féretro.
⁃ Al que profane un cadáver o restos humanos con actos de vilipendio, mutilación, brutalidad o necrofilia. Si los actos de necrofilia consisten en la realización del coito, la pena de prisión será de cuatro a ocho años.
De acuerdo con las autoridades, las personas que profanan tumbas generalmente utilizan los cuerpos para el trasiego de drogas.
También, aseguraron, los utilizan para rituales de santería o brujería.
El caso más reciente de una exhumación que tuvo repercusión en Puebla fue el del bebé Tadeo.
Cabe recordar que, como EL UNIVERSAL PUEBLA lo documentó, el cuerpo del pequeño fue sustraído del panteón Nicolás Tolentino en la Delegación Iztapalapa de la Ciudad de México para ser ingresado al penal de San Miguel.
Actualmente 17 ex funcionarios del centro penitenciario, entre ellos los ex encargados de la dirección y subdirección, están tras las rejas del penal de Tepexi de Rodríguez.
También están encarcelados la mujer y los dos custodios que fueron los responsables de introducir el cuerpo del bebé.
