La Gran Pirámide de Cholula, también conocida como Tlachihualtépetl, es la pirámide más grande del mundo y a pesar de su monumental tamaño, gran parte permanece oculta bajo una montaña, lo que puede llevar a que pase desapercibida para muchos.
Tiene una base de 450 metros de ancho y 66 metros de altura, superando en tamaño a la Gran Pirámide de Giza, en Egipto, con una base cuatro veces más grande y casi el doble de volumen, según el Instituto Nacional de Arqueología e Historia (INAH).
¿Por qué no se desentierra la pirámide de Cholula?
Si bien la apariencia actual de la gran pirámide es la de un cerro y muchos quisieran verla en su mayor esplendor, la realidad es que no puede ser desenterrada, puesto que en su cima se encuentra un templo católico dedicado a la Virgen de los Remedios.
El Santuario de la Virgen de los Remedios fue construido en 1594 como una humilde ermita; sin embargo, en 1864 un terremoto la destruyó casi por completo por lo que tuvo que ser reconstruida en 1874.
De acuerdo con Juan Francisco Salamanca Montes, profesor investigador del Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), la imagen de la Virgen de los Remedios llegó a la Nueva España gracias al capitán Juan Rodríguez de Villafuerte.
La gran devoción en aquella época hacia la Virgen se debe a: “Que la virgen se les apareció a los españoles durante la noche triste; por ello también es conocida como la Virgen Conquistadora”, mencionó Salamanca.
Actualmente, este Santuario es Patrimonio Cultural de México, por lo tanto la Gran Pirámide no puede ser desenterrada en su totalidad, además de que dicha pirámide fue hecha de tierra.
De hecho, lo que observamos al visitar esta importante zona, es el núcleo central de lo que fue la gran pirámide. En pocas palabras, actualmente solo existen aislados adosamientos de piedra caliza, puesto que el resto fue devastado por el abandono de más de 200 años.
¿Qué hay debajo de la pirámide de Cholula?
Si bien no podemos desenterrarla en su totalidad, arqueólogos han hecho una serie de túneles que les permite entender la historia y estructura de este monumento prehispánico.
Según datos oficiales del INAH, en 1931 iniciaron de manera formal las exploraciones arqueológicas en la pirámide de Cholula, las cuales concluyeron hasta 1971.
Los arqueólogos e investigadores Alexander von Humboldt, Manuel Gamio y Enrique Juan Palacio decidieron explorar la gran pirámide por debajo, es decir, a través de túneles.
Durante los trabajos de excavación se encontraron altares con ofrendas, pisos, muros y entierros humanos.
Después de su última exploración en 2002, la suma de cada tramo de túnel excavado en el interior es de más de 5 mil metros de distancia.
Cabe destacar que gracias a estos túneles arqueológicos, se ha determinado que la pirámide fue construida alrededor del siglo II a.C. y se completó entre el 900 y 1100 a. C.