La verificación vehicular llegó a finales del siglo pasado, junto con el programa Hoy no circula, y se estableció como una medida obligatoria.
Ambos programas surgieron debido a la contaminación ambiental y el incremento del parque vehicular, así como por las emisiones de gases de vehículos en malas condiciones.
En principio fueron acciones voluntarias, pero terminaron por volverse obligatorias y ligarse a las multas.
Incluso, en el plano regional se creó la Comisión Ambiental de la Megalópolis (Came) que es un organismo de coordinación política constituido el 23 de agosto de 2013.
Por ello, es que la verificación vehicular está vigente en la Ciudad de México, Estado de México, Hidalgo, Morelos, Puebla y Tlaxcala, de manera homologada.
Su objetivo es planear y ejecutar acciones en materia de protección al ambiente, además de preservar y restaurar el equilibrio ecológico en la región, que comprende 16 alcaldías de la Ciudad de México y 224 municipios en total, entre el Estado de México, Hidalgo, Morelos, Puebla y Tlaxcala.
De ahí que la verificación vehicular sea obligatoria en el estado de Puebla y la operación de sus verificentros se apegue a los parámetros y lineamientos dictados por la Came.
La verificación vehicular tiene su origen en la capital del país, cuando en 1989 se detectaron altos índices de contaminación ambiental, por lo que las autoridades decidieron realizar estudios de la calidad del aire.
Dichos estudios arrojaron como resultado que la principal causa de dicha contaminación son los vehículos automotores.
Para solucionar lo anterior, se implementó un programa de revisión de automóviles para monitorear sus emisiones contaminantes basado en las especificaciones en vigor del programa "Buró de Reparaciones Vehiculares" (BAR), del condado de Los Ángeles, California, quienes lo pusieron en marcha por la crisis ambiental que también sufrieron en 1984.
El BAR medía únicamente hidrocarburos y monóxido de carbono, según se relata en la reseña publicada por la Secretaría de Medio Ambiente de la Ciudad de México.
En 1997 se autorizaron, 59 verificentros en los que se implementó el uso de equipo CAM-97, se instalaron cámaras de video vigilancia y se comenzó a medir un contaminante más: Óxidos de Nitrógeno (NOx).
Dos décadas después, y tras diversos cambios en la operación, los equipos y niveles de medición, en 2017, la verificación vehícular se hizo obligatoria en 16 estados más: Baja California, Coahuila, Chihuahua, Ciudad de México, Estado de México, Hidalgo, Morelos, Puebla, Tlaxcala, Querétaro, Jalisco, Guanajuato, Michoacán, Oaxaca y Veracruz.
En 1989, durante el sexenio del priista Mariano Piña Olaya, inició la política de verificar la emisión de gases contaminantes de automotores.
En 1996, con el entonces gobernador Manuel Bartlett Díaz, la verificación se volvió obligatoria.
En 2005, durante el sexenio de Melquiades Morales Flores, el gobierno estatal exigió a los propietarios de verificentros su modernización.
En 2008, en el sexenio de Mario Marín Torres, se realizaron las llamadas “pruebas dinámicas”, mediante las cuales se implementaron las calcomanías 0 y 00 para mejorar el control.
En junio de 2008 se homologaron las políticas de control de la contaminación por parte en la Ciudad de México, Querétaro, Hidalgo, Puebla, Tlaxcala y el estado de México.
En Puebla, a nivel estatal había 83 verificentros. De ellos, 24 contaban con el sistema de “prueba dinámica”.
En Puebla capital se ubicaban 14 y el resto en Teziutlán, San Martín Texmelucan, Izúcar de Matamoros, Tehuacán, Huauchinango, Atlixco, San Pedro y San Andrés Cholula.
El 23 de junio de 2014 entró en operación, un nuevo Programa de Verificación Vehicular Obligatorio”, con el que se transitó hacia un nuevo modelo homologado de centros en los que se incorporaron equipos de tecnología de punta y sistemas de control de calidad, acordes con los lineamientos de la Comisión Ambiental de la Megalópolis.
En julio de 2014, la administración de Rafael Moreno Valle suplió las concesiones de verificentros que operaban, en la entidad, por solo 17.
En marzo de 2020, la actual administración determinó cancelar todas las concesiones de verificentros en Puebla, por diversas irregularidades y violaciones a la Norma Oficial Mexicana y el programa de verificación vehicular quedó suspendido.
Al momento, la administración estatal ha otorgado 16 concesiones de un total de 34 que tiene programado poner en operación.
Se espera que la verificación vehicular comience en Puebla en los primeros días de octubre próximo.
Ello, a la espera de que la autoridad competente a nivel estatal, haga el anuncio oficial.