En recientes días, autoridades de la Secretaría de Salud estatal han dado cuenta del repunte en el número de nuevos contagios por Covid-19 en Puebla.
Por ello, es importante que la población continúe aplicando las medidas de salud e higiene, así como vacunarse para reducir los riesgos de contagio.
Sin embargo, a raíz de que se conoció que a México ha llegado la vacuna Abdala, proveniente de Cuba, hay quienes han expresado su rechazo a la misma.
En redes sociales, los usuarios sostuvieron que tienen miedo o desconfianza, mientras que otros basan su negativa por tintes políticos.
Además, también rechazan la dosis Abdala porque dijeron que tienen efectos secundarios y muy peligrosos, pero no sustentaron esta teoría.
Otra razón es su origen. Entre los comentarios señalaron que fue una adquisición del gobierno federal para ayudar al régimen cubano, pero que esa vacuna no sirve.
Algunos más indicaron que no se vacunarán con la dosis Abdala porque buscando información esta no está avalada por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
También hay quienes recibieron dosis de marca Pfizer o AstraZeneca y para el refuerzo no piensan “mezclar” con Abdala.
“No me aplicaré esta pócima cuyo perfil inmunogénico y protector es un misterio, no se encuentra validado, ya no digamos por la OPS/OMS, sino por ningún colegio de profesionales de la salud”, “No es preventiva, sino de experimentación”, “Una vacuna de un dictador cubano no entrará a mi cuerpo”; son parte de los comentarios que se pueden leer en las redes sociales.
Existen voces que refirieron que el poco interés de las personas por vacunarse en realidad es por el periodo de vacaciones que se viven por la temporada decembrina, pues muchos salieron a otros destinos fuera de Puebla.
El llamado de las autoridades del sector salud es a no relajar las medidas de salud, higiene y sana distancia, pero sobre todo a que se sigan vacunando para evitar aumente el número de nuevos casos.
De acuerdo con artículos de salud de Cuba, la dosis Abdala muestra una eficacia del 100 por ciento tanto en la prevención de la enfermedad sistémica severa, como de la muerte por la Covid-19.
Autoridades del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB) sostienen que en el estudio realizado ninguno de los pacientes evolucionó hacia la severidad, como tampoco hubo fallecimientos.
Para esos análisis de eficacia contaron con 153 pacientes, de ellos 142 placebos y 11 que recibieron Abdala. En todos los casos fueron pacientes PCR positivos, que desarrollaron síntomas y signos de la enfermedad a partir de los 14 días posteriores a la inoculación de la tercera dosis.
