Imágenes de jóvenes, presumiblemente estudiantes, que salen en mal estado luego de acudir a los antros ubicados en la colonia Villa Universitaria volvieron a encender los en torno a esos establecimientos. Videos y fotos circulan en redes sociales, lo que constituye un testimonio fehaciente de la problemática que persiste en esa colonia.

Los residentes del área reiteraron el llamado al Ayuntamiento de Puebla para que intervenga, al tiempo que piden que se revise la regulación de esos establecimientos y solicitan a los asistentes ser responsables al consumir bebidas embriagantes.

En concreto, piden la clausura del antro “Guajira Beach”, al señalar que allí, presuntamente, se expenden a los jóvenes bebidas adulteradas. Comentan que algunos jóvenes, tras asistir a ese establecimiento, terminan en mal estado, incluso tirados en la banqueta y la calle, hasta que son atendidos por los cuerpos de auxilio. Otros establecimientos señalados son “El Pre” y “El Mar y Chela”.

Por su parte, el gobernador de Puebla, Sergio Salomón Céspedes Peregrina, señaló que se debe aplicar con fuerza la normatividad. “Pero tenemos que estar atentos al origen. Las familias tenemos que estar pendientes de nuestros hijos y más de nuestros jóvenes, es una etapa muy importante. Así que hagamos sociedad entre todos, hagamos comunidad, y ese tipo de casos no pueden suceder”, comentó.

“Los vi, son penosos, es lamentable, qué dolor para cualquier padre ver a un hijo así”. Al tiempo que dijo que la autoridad debe aplicar la normatividad de forma muy estricta y no soltar el tema porque se tiene que gobernar hasta el último día.

A la pregunta sobre la apertura de más locales en esa colonia, apuntó: “no tiene que haber permisos, que se cierren. Así como se abren, que se cierren. Una cosa es que puedan convivir, no nos espantamos, y otra que terminen en ese tipo de condiciones”, resaltó.

En torno al tema, el presidente municipal Adán Domínguez aseveró que su administración continúa con operativos para sancionar bares que no cumplen con la normatividad, incluidos los situados en las inmediaciones de Ciudad Universitaria.

Apuntó que el área de realiza inspecciones y mencionó que la semana pasada se clausuró “este bar que se comenta”.

Argumentó que, tras una clausura, el establecimiento tiene la posibilidad de pagar la multa y tiene 45 días para regularizarse. Subrayó que estarán pendientes todos los días para que se cumpla con la normatividad, pero sugirió a los padres de familia estar pendientes de sus hijos.

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