Las afectaciones emocionales pueden ser irreversibles cuando un niño presencia el homicidio de uno de sus padres.
Tras estar expuesto a este acto delictivo, de acuerdo con las autoridades, puede presentar los siguientes síntomas:
⁃ Temor.
⁃ Aislamiento.
⁃ Problemas para conciliar el sueño.
⁃ Pérdida de apetito.
⁃ Dolores de cabeza y estómago.
⁃ Irritabilidad.
Según los expertos, el niño que llega a ser testigo del asesinato de uno de sus padres puede sentir estas réplicas emocionales y físicas por meses, incluso años.
Aseguran que puede revivir el evento una y otra vez en sus mentes y ser menos capaz de funcionar normalmente en su vida diaria.
Si el menor no recibe la ayuda necesaria, apuntan, se vuelve más agresivo, violento y, en ocasiones, hasta autodestructivos.
¿Cómo ayudarlo?
De acuerdo con los expertos, el niño que presencia el homicidio de uno de sus padres no solo debe recibir la ayuda de un psicólogo, sino de todo su entorno afectivo.
Los integrantes de su familia detallan, tiene que animarlo principalmente a que hable sobre ese tema.
Los expertos aseguran que deben permitirle expresar lo que está sintiendo, incluyendo el miedo, la ansiedad y el enojo.
Indican que sus familiares deben dejarlo hablar sobre el tema las veces que sean necesarias para que saque todo y no se guarde nada.
Niñas presencian el homicidio de su papá en Puebla
El pasado jueves 2 de febrero dos niñas presenciaron el homicidio de su padre, en el municipio de Tepeaca.
Como EL UNIVERSAL PUEBLA lo documentó, el agraviado transitaba por la junta auxiliar San Hipólito Xochiltenango.
Unos sujetos lo interceptaron y lo mataron a balazos frente a sus dos hijas menores de edad que lo acompañaban.
Los responsables también hirieron a una de ellas en una pierna.
Hasta el momento, los sujetos no han sido localizados por las autoridades.