La laguna de Alchichica destaca por sus impresionantes tonalidades, las cuales varían cada temporada, otorgándole una apariencia mágica y enigmática.
Dicen que tiene conexión con el océano, por la salinidad de sus aguas, y que en el fondo se esconde un secreto de otro mundo.
Según la página de la Comisión Nacional del Agua, es considerado un “lago cráter volcánico”, es decir, un axalapasco que se formó después tras una gran explosión volcánica.
Esta formación volcánica es de las más grandes de Puebla y se estima que se formó hace más de 20 mil millones de años.
Sin embargo, lo que más ha llamado la atención de investigadores son las especies que se encuentran en su interior.
De acuerdo con la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO), la laguna cuenta con especies consideradas microendémicas, como lo son: el alga diatomea cyclotella alchichicana, el crustáceo copépodo leptodiaptomus garciae, el isópodo caecidotea williamsi, el pez poblana y el anfibio ambystoma taylori.
De esas especies, dos se encuentran en peligro de extinción: el charal de Alchichica y la salamandra de Taylor y si es que no los conocías aquí te los presentamos:
El charal de Alchichica (Poblana Alchichica)
Esta especie endémica de Alchichica es un pez pequeño y delgado que mide entre 6.5 a 12 centímetros.
Es mayormente transparente, salvo porque posee una línea lateral plateada y tiene alrededor de 50 escamas y dos aletas dorsales.
El charal de Alchichica es un pez comestible que los habitantes de la zona pescan de manera rústica.
No obstante, diversos factores como la sobrepesca, la limitada distribución, la extracción excesiva de agua para uso humano y el consiguiente aumento en la salinidad del lago, contribuyen a que la Norma Oficial Mexicana la considere una especie amenazada.
La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza la tiene clasificada como una especie en peligro crítico de extinción (CR).
Esta especie suele encontrarse a profundidades de hasta 55 metros y esto se debe a que se alimenta de organismos ubicados en el fondo de la laguna.
Ajolote de Alchichica (Ambystoma Taylori)
La otra especie en peligro de extinción y quizás la más conocida es el ajolote de Alchichica, conocido científicamente como Ambystoma Taylori y es una de las 17 especies de ajolotes que existen en México.
Este ajolote puede llegar a crecer hasta 25 centímetros, incluyendo la cola.
Su cabeza es un poco más ancha que larga, y su desarrollo está asociado a la vegetación con presencia de yaca, nopal, choya, maguey, encino y matorral espinoso.
De acuerdo con el programa de Acción para la Conservación de Especies (PACE), de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), el ajolote de Alchichica es de color pardo con manchas negras. Cada patrón de esas manchas es distinto y no hay dos iguales.
Esta especie se encuentra en peligro de extinción debido a diversos motivos, entre ellos, la sobreexplotación del subsuelo, la deforestación, la contaminación y extracción del agua de la laguna.
Este ajolote se reproduce en el lago y se encuentra con mayor frecuencia en aguas a más de 30 metros bajo la superficie.
Por último es importante resaltar que la protección de estos hábitats y la implementación de medidas de conservación son esenciales para asegurar la supervivencia de estas y otras especies vulnerables en la región.
