La inseguridad está ligada a delitos que por lo general son conocidos como asalto, robo a casa habitación, extorsión, feminicidio, secuestro y lenocinio, por citar solo algunos.
Pero hay crímenes que son poco comunes, que no pasan por la mente de muchas personas que se registran en Puebla y que no están en la atención de la ciudadanía.
En este caso, por ejemplo, se encuentra el robo del cirio de la iglesia de San Diego de Alcalá en el municipio de Huejotzingo, que fue realizado por una mujer y que quedó grabado en video.
Por supuesto, se hizo viral, por lo poco usual que representa, ya que no se trata de arte sacro.
En diciembre del año 2020, un joven confesó robar la limosna de una iglesia del Centro Histórico.
En noviembre del año 2022, un hombre fue exhibido en redes sociales por dedicarse a robar pastillas de los medidores de luz.
En ese momento se dijo que operaba principalmente en las inmediaciones de la Avenida Juárez de Puebla
Otro robo que recientemente se ha comenzado a registrar es el de cámaras de vigilancia.
El 17 de abril en redes sociales se alertó de un caso más en Chignahuapan, en concreto en la primera calle de Cuauhtémoc.
En el plano institucional, el reporte de incidencia delictiva de la Fiscalía General del Estado de Puebla (FGE) durante el 2022, a nivel estatal contabilizó:
Un total de 105 casos de robo de ganado. En doce casos se registró violencia y en 93 el robo se efectuó sin violencia.
En el rubro de robo de maquinaria, hubo 810 casos que se tradujeron en igual número de carpetas de investigación.
De los 810 casos, 34 fueron por robo de herramienta industrial o agrícola y cinco por robo de tractores.
Y el mayor número, 771 casos, se registró como robo de cables, tubos y otros objetos destinados a servicios públicos.
Por otra parte, se abrieron 5 mil 638 carpetas de investigación por amenazas, 374 por allanamiento de morada y 140 por falsedad.