El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef, por sus siglas en inglés) señala los derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes (NNA) entre los que se destaca el derecho a la vida, a la supervivencia y al desarrollo.
Sin embargo, en el estado de Puebla ese derecho ha sido violentado por adultos que han acabado con la vida de los infantes, en su mayoría niñas.
A través de las noticias se han dado a conocer casos que han estremecido, conmocionado e indignado a los poblanos, mismos que enunciamos a continuación.
El próximo 27 de junio se cumplirá un año de este feminicidio en contra de Brenda, una menor de 4 años, vecina de la colonia El Santuario, en la comunidad de Ocotitlán, del municipio de Chichiquila, quien fue sacada de su casa por dos jóvenes que abusaron sexualmente de ella y la mataron.
Los familiares la buscaron luego que no la encontraron en su vivienda, donde estaba sola cuando Mauricio G. de 19 años, y Antonio H. de 20 años, la extrajeron de su casa.
El extinto Miguel Barbosa Huerta cuando conoció de este hecho la revictimizó al igual que a su familia al decir que el crimen se pudo haber evitado si “la hubieran cuidado más”.
A los presuntos responsables se les detuvo y están en espera de que concluya el proceso.
La mañana del 18 de enero de 2022 se conoció el caso de María Isabel, de 10 años, una menor, que fue asesinada y abusada sexualmente en la comunidad de Coyotzonga, perteneciente al municipio de Zoquitlán, ubicado en la Sierra Negra poblana.
El cuerpo de la menor fue encontrado por familiares y pobladores que iniciaron la búsqueda tras notar que no llegó a dormir al domicilio de una vecina, con quien siempre se quedaba para hacerle compañía.
La vecina vive a 10 minutos de la casa de María Isabel, por lo que todas las tardes la menor se iba con ella para acompañarla en la noche y así lo hizo la tarde del 17 de enero.
Sin embargo, a la mañana siguiente que no llegó a su casa, sus familiares fueron a buscarla a casa de la vecina y ella les informó que la menor nunca se presentó en la tarde, por lo que comenzaron la búsqueda, hallando el cuerpo sin vida entre matorrales.
De este caso no hay detenidos y la carpeta de investigación continúa abierta.
El pasado 22 de mayo un hecho de violencia intrafamiliar terminó en un feminicidio en contra de Vanessa, una menor de 13 años, que fue asesinada con cinco disparos por parte de su padrastro, identificado como Damaso N.
Los hechos se registraron en la carretera Acatlán de Osorio – San Juan Ixcaquixtla, a la altura del kilómetro 89 + 430, a la altura de la zona donde se encuentra un basurero.
De acuerdo con las primeras indagatorias, el hombre, estando bajo los influjos del alcohol y algunas sustancias tóxicas, comenzó a agredir a su expareja, madre de Vanessa.
En la pelea amenazó con una pistola a la madre y a la menor para que subieran a un automóvil, el cual condujo hasta un basurero. Al llegar las bajó del auto y disparó en contra de la señora, por lo que la menor corrió a abrazar el cuerpo de su madre y en ese momento el sujeto le disparó cinco veces y así perdió la vida.
La madre de la menor fue internada para su atención médica, mientras que vecinos y pobladores de Acatlán ofrecen una recompensa de 100 mil pesos a quien dé informes sobre el paradero de Damaso N.
El 24 de marzo de 2022 la tranquilidad del municipio de Cuetzalan se vio interrumpida luego que se conoció la muerte de Rosa María López Moreno, de 15 años.
Los familiares de Rosa María la habían reportado como desaparecida, ya que el domingo 20 de marzo salió de su casa rumbo a su trabajo, pero ya no regresó en la noche.
Los trabajos de búsqueda comenzaron y encontraron el cuerpo de la niña hasta el 24 de marzo. Presuntamente, la causa de su muerte fue asfixia mecánica.
No se tiene información de que hayan encontrado al responsable de su muerte, ya que, según amigos y familiares de Rosa María, el Ayuntamiento de Cuetzalan y la Policía Municipal han escondido información por temor a confirmar que se trató de un feminicidio infantil en Puebla.
Los hechos ocurrieron el 11 de junio de 2020 en la comunidad de Santa María Nenetzintla, perteneciente al municipio de Acajete, cuando al interior de un vehículo calcinado fueron hallados los cuerpos Gardenia N. y Dulce N., madre e hija.
Tras una orden de cateo a tres viviendas que realizó la Fiscalía General del Estado (FGE), en el municipio de Acajete se logró la detención de cuatro sujetos como parte de la investigación, siendo Alonso N., el principal sospechoso del feminicidio y quien fue detenido en Chiapas.
Las causas de este doble feminicidio no se esclarecieron.
De acuerdo con cifras del Consejo Ciudadano de Seguridad y Justicia del Estado de Puebla, los casos de feminicidios en contra de menores de 17 años tuvieron un alza en el 2020.