Han pasado más de 20 días desde que apareció el socavón en Puebla.
La oquedad duplicó su tamaño en este tiempo. El sábado 29 de mayo, un agujero de poco más de 60 metros de diámetro se abrió en un terreno de cultivo de Santa María Zacatepec, comunidad del municipio Juan C. Bonilla.
Actualmente, el socavón de Puebla mide 126 metros en su eje mayor y 122 metros en el menor, esto de acuerdo con los últimos datos reportados por Ana Lucía Hill Mayoral, secretaria de Gobernación del estado.
¿Por qué se formó el socavón? Avanzan investigaciones
Especialistas del Instituto Politécnico Nacional (IPN) trabajan en conjunto con el gobierno de Puebla para encontrar las causas; hasta el momento hay tres posibles hipótesis que explican este fenómeno.
- * El socavón se formó por causas naturales del subsuelo
- * Las actividades humanas provocaron el colapso del terreno
- * Una combinación de los dos anteriores factores
Pedro Francisco Rodríguez Espinosa, investigador del IPN, dijo que los especialistas que trabajan en la zona han registrado una combinación de procesos de efectos acumulativos, los cuales involucran el intensivo aprovechamiento del agua en la zona.
Los habitantes de la zona señalan que empresas ubicadas en la región podrían haber causado el socavón al realizar una sobreexplotación de los mantos acuíferos. Principalmente señalan a Bonafont, aunque también han señalado al parque industrial Ciudad Textil, Mercatus, entre otras.
El pasado 11 de junio, Beatriz Manrique Guevara, secretaria de Medio Ambiente, Desarrollo Sustentable y Ordenamiento Territorial, informó que en 30 días se conocerán los resultados de un estudio integral para conocer el origen del socavón.
Socavón, un riesgo
Carlos Valdés, investigador del Instituto de Geofísica de la UNAM, explicó que vibraciones tan leves como las que causa una persona al caminar o hablar, pueden provocar que el socavón se extienda aun más.
Valdés, quien fue jefe del Servicio Sismológico Nacional (SSN), explicó que la inestabilidad del socavón se explica por varias razones. Una de ellas, son las paredes muy verticales de este agujero.
“Vemos que las paredes son muy verticales, prácticamente son las paredes de un edificio, se puede recortar a un ángulo de 45° y esto le daría estabilidad. Pero no habría manera de meter ningún instrumento, aparato o hacerlo de forma manual, porque el mismo peso de estos equipos puede provocar que se venga abajo”, explicó.
Otras de las razones por las que el socavón de Puebla es todavía un riesgo para la población es la temporada de lluvias y que el suelo alrededor del socavón es del mismo tipo.
“El suelo que está alrededor se ve un terreno muy, muy fértil y puede presentar la misma condición”, puntualizó.
El exdirector del Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED) durante más de cuatro años,
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