Durante las primeras horas de hoy, fueron localizados entre cuatro y siete cuerpos en dos vehículos calcinados que fueron abandonados en la junta auxiliar de Santa María Xonacatepec, al norte de la ciudad de Puebla.
Los primeros datos indican que un vehículo fue abandonado debajo del puente que conduce a la comunidad, en la autopista Puebla-Orizaba, mientras que el otro apareció en calles aledañas a la presidencia auxiliar.
El caso se complica en cuanto a las indagatorias, ya que una de las unidades fue ubicada sobre la autopista, por Bosques de San Sebastián, lo que lo coloca en el marco de competencia de la autoridad federal.
A reserva de que la autoridad emita información oficial, trascendió que en total, en las dos unidades, se habrían localizado al menos siete cadáveres.
Se informó extraoficialmente que los cuerpos podrían estar desmembrados, por lo que inicialmente es incierto el número exacto de víctimas que podrían haber sido abandonadas.
Tras el reporte del funesto hallazgo, elementos de auxilio llegaron al área para establecer perímetros de control, mientras que personal de la Fiscalía General del Estado de Puebla (FGE) inició el levantamiento de los cuerpos, la recolección de evidencias y las investigaciones correspondientes.
Inicialmente, se detuvo el paso de vehículos en la parte baja del puente, pero una vez concluidas las labores pertinentes, se permitió la reanudación del tránsito vehicular. En la zona, se contó con la presencia de elementos del cuerpo de bomberos y de la policía.
El hallazgo causó gran conmoción entre los habitantes del área, debido a que, en el pasado reciente, se han registrado hechos violentos que podrían estar relacionados con ajustes de cuentas entre bandas rivales del crimen organizado.
Se espera que, en el transcurso del día, las autoridades emitan información oficial. Extraoficialmente, trascendió que los vehículos, antes de ser incinerados y abandonados, provenían de Amozoc.
Asimismo, se especula que la unidad incendiada en la autopista estaría relacionada con un sujeto apodado “El Sapo”, integrante de “Los Lampones”, una banda dedicada al robo con violencia a casa habitación y negocio.
El vehículo estaría a nombre de una mujer relacionada con otro individuo llamado Leobardo N., procesado por el delito de tentativa de homicidio en Matamoros, Tamaulipas, con un largo historial delictivo en ese estado y en San Luis Potosí.