Asistir a la Feria de Puebla, como a la mayoría de espectáculos de ese tipo, está ligado a un gasto que depende en gran medida de la capacidad económica de cada persona.
En consecuencia, si bien el acceso tiene un costo económico y hay múltiples actividades y atracciones gratuitas, también es necesario invertir en otros rubros como la alimentación y la diversión.
En principio hay que considerar que el boleto de entrada tiene un costo por persona de 50 pesos, y si se asiste en compañía de otra persona o bien de una familia, hay que multiplicar esa inversión.
En caso de utilizar un vehículo particular es necesario pagar el costo del estacionamiento del Centro Expositor que es de 100 pesos o bien entre 200 y hasta 250 pesos a los franeleros o particulares para dejar la unidad en la vía pública.
Para los juegos mecánicos, hay que adquirir una tarjeta con una inversión inicial de 20 pesos y abonar la cantidad que se considere necesaria para ello.
En cada juego mecánico se deben pagar entre tres y seis tickets. El costo de los tickets está entre 14 y 20 pesos.
Por lo que hace a los alimentos y bebidas, el costo de las micheladas oscila en los 250 pesos; las clamachelas, hasta en 500 pesos y un refresco, 80 pesos.
Un kilo de carne árabe o al pastor cuesta 350 pesos y una orden de cuatro tacos al pastor tienen un valor promedio de 60 pesos.
Un paquete familiar de hamburguesas, papas y agua cuesta 300 pesos.
Por supuesto, si se quiere acceder la sección especial del Teatro del Pueblo, o bien al Palenque hay que considerar el precio de acuerdo al artista que se presenta.
Sólo es cuestión de multiplicar y sumar, pero sobre todo, definir cuál es el presupuesto personal y la capacidad de gasto para determinar cuánto puede costar pasar un día en la Feria de Puebla.