Los feminicidios de las niñas María Isabel y Brenda marcaron un antes y un después, en materia de seguridad, en los municipios de Zoquitlán y Chichiquila.
En ambas demarcaciones, la seguridad aumentó considerablemente, de acuerdo a los propios pobladores.
Antes sólo eran vistos los contados policías municipales con los que cuentan ambas comunidades.
Sin embargo, los rondines se intensificaron y ahora también los realizan los policías estatales y, en ocasiones, personal del Ejército Mexicano.
Las mismas personas ya no son tan confiadas, como estaban acostumbradas.
Ahora prefieren ya no salir tan tarde de sus domicilios y a sus hijos los tienen más vigilados.
Las autoridades de ambas demarcaciones le piden a la ciudadanía reportar cualquier actividad sospechosa de alguna persona.
También les solicitan mantener comunicación con su hijos y acompañarlos cuando salgan a la calle.
EL UNIVERSAL PUEBLA documentó los feminicidios de ambas niñas que ocurrieron este 2022.
María Isabel, de 10 años de edad, fue localizada con signos de violencia y abuso sexual el 18 de enero, en el municipio de Zoquitlán ubicado en la Sierra Negra.
Mientras que Brenda, de 4 años, también fue encontrada con huellas de violación y signos de extrema violencia, en el municipio de Chichiquila que se ubica en los límites con Veracruz.