A fin de mantener a salvo a cientos de familias de la junta auxiliar de San Pablo Xochimehuacán, donde la madrugada de este domingo se registró una explosión por la ordeña en un ducto de Pemex, autoridades no permitirán el regreso a sus viviendas.

María del Consuelo Cruz Galindo, secretaria de Seguridad Ciudadana del municipio de Puebla, dio a conocer que primero se analizarán los daños que sufrieron las viviendas para que sus moradores no corran riesgos.

Añadió, durante su arribo a la zona cero, que de acuerdo con el dictamen de los delegados de Petróleos Mexicanos se determinará la fecha para que las familias regresen a sus propiedades.

Subrayó que lo más importante es garantizar la integridad física de los habitantes en esta zona, donde aún se mantiene vivo el fuego para despresurizar el ducto de gas LP y realizar el sellado.

En tanto, Bernardo Arrubarrena García, secretario de Administración del municipio de Puebla, convocó a los vecinos de las colonias afectadas para organizarse y entrar a sus viviendas a fin de poner a salvo a sus mascotas.

De igual manera, pidió que, en compañía de elementos de la Guardia Nacional, sólo permanezcan unos breves minutos para recoger documentos oficiales y medicamentos para quienes están bajo tratamiento.

Ante la desesperación de los vecinos, quienes insisten en entrar a sus viviendas para evitar que sean saqueadas, la autoridad municipal insistió que elementos de Seguridad Pública Estatal y Municipal llevan a cabo operativos para evitar la rapiña.

En tanto, Eduardo Rivera Pérez, presidente municipal de Puebla y Ana Lucía Hill Mayoral, secretaria de Gobernación estatal, realizaron un recorrido a tres albergues que se instalaron para atender a los damnificados por la explosión.

Con el apoyo de personal del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), tanto estatal como municipal, se proporcionan alimentos y enseres en los albergues instalados en el Auditorio de la colonia Villa Frontera, en la junta auxiliar de San Felipe Hueyotlipan y en el templo de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.

Las autoridades estatales informaron que la mayoría de los evacuados han decidido alojarse en casas de familiares y amigos, pero los albergues temporales están habilitados para atender a todos los que así lo necesiten, ya que al menos esta noche no podrán regresar a sus casas.

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