El aguacate es uno de los productos más exitosos de la exportación agroalimentaria del país, por lo que México se ha convertido en el principal proveedor de este maravilloso fruto.
El aguacate es el fruto del árbol del mismo nombre, de hoja perenne de la familia de las lauráceas; su nombre proviene del náhuatl “ahuácatl”, que significa testículo, probablemente por la forma colgante del fruto.
La historia de este preciado fruto inició en el año 8,000 a. C en una caverna de Coxcatlán, ubicada en la región de Tehuacán, Puebla. Así lo reveló un estudio realizado por Salvador Sánchez Colín, Pedro Mijares Oviedo, Luis López-López y Alejandro F. Barrientos-Priego, el cual cuenta la historia del aguacate en México.
Por otra parte, en el códice Florentino se mencionan tres tipos de aguacate: aoacaquauitl, tlacacolaoacatl y quilaoacatl, los cuales, es posible que correspondan a las tres razas que son conocidas ahora.
Puebla es el séptimo estado del país con mayor producción de aguacate, ya que en 2020 alcanzó las 16 mil 910.38 toneladas para el mercado nacional, según datos del Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER).
De acuerdo con el Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera, en Puebla son 45 los municipios que se dedican a la producción de aguacate.
En 2020, el municipio con mayor producción de aguacate fue Quimixtlán con 3 mil 477.15 toneladas, el segundo fue Tochimilco con 2 mil 295.15 toneladas, seguido de Chichiquila con mil 409.78 toneladas, Atlixco con mil 120.79 toneladas y Zacapala con mil 7.10 toneladas.
El aguacate Hass, Fuerte, y Criollo son las principales variedades de este fruto que se producen en el estado de Puebla.
Este tipo es el más conocido y comercializado; es de pequeño tamaño, rugoso y de piel oscura y pulpa amarilla.
Su porción de agua es del 70%, mientras que también cuenta con un amplio contenido de vitaminas B y E.
Esta variación del Hass es poco conocida, pero nació en Atlixco. Su forma es de pera, pero sin brillo, su piel es fina y áspera. El sabor es fuerte, pero brinda un mayor aporte nutricional.
Las personas que lo conocen aseguran que su textura es similar a la de mantequilla.
Este fruto es pequeño y perfumado, tienen un sabor fuerte e inigualable, lo mejor de este tipo de aguacate es que se puede consumir con todo y cáscara.