Luego de que se conocieron brotes de chinches en las facultades de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en las instalaciones del metro y en otros sitios públicos, en redes sociales los usuarios señalaron que el tema era un problema de salud pública y hubo quienes alertaron para evitar contraer la enfermedad de Chagas.
De acuerdo con el investigador e infectólogo, el doctor Alejandro Macías, el fenómeno de las chinches que se han reportado en las noticias corresponde a un insecto de cama y no es un problema de salud pública. Sí, son molestas, pero no generan enfermedades.
En tanto, existen las chinches besuconas o las trypanosomas, que son insectos infectados con trypanosoma cruzi y una vez que pican a las personas les pueden provocar la enfermedad de Chagas, padecimiento sí es un problema de salud pública.
Información de la Secretaría de Salud del gobierno federal explica que este padecimiento se transmite, principalmente, a través de la picadura de insectos triatominos infectados que suelen habitar en grietas, huecos de paredes y tejados de casas.
El parásito también puede transmitirse de la madre al hijo al momento del embarazo o del parto, así como por transfusiones de sangre, trasplantes de órganos o el consumo de alimentos contaminados.
La mayoría de los casos por enfermedad de Chagas se registran en zonas rurales y pobres, donde las viviendas suelen estar en malas condiciones y no se cuenta con medidas adecuadas para controlar las plagas.
Los síntomas de la enfermedad de Chagas pueden variar según la fase del padecimiento; se divide en aguda y crónica.
En la fase aguda, que puede durar de unas pocas semanas a unos pocos meses después de la infección, es posible que no se presenten síntomas o que sean leves y no específicos, lo que dificulta el diagnóstico.
Algunos de los síntomas más comunes en la fase aguda pueden incluir:
Es posible que no se presenten síntomas o que sean muy leves. En algunos casos la enfermedad puede progresar y afectar el corazón, el sistema digestivo y el sistema nervioso, causando complicaciones graves.
Con el paso de los años, la infección puede causar muerte repentina.
En el Boletín Epidemiológico del Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica de la Secretaría de Salud federal, correspondiente a la semana 38 y con corte al 30 de septiembre de 2023, en Puebla se tiene un acumulado de 21 casos crónicos de Enfermedad de Chagas, de los cuales 13 corresponden a hombres y ocho a mujeres.
A tres meses de que concluya el presente año, esta cifra ya rebasó los 19 casos crónicos de enfermedad de Chagas que se contabilizaron en todo el 2022 para la entidad.
A nivel nacional, el año pasado cerró con un total de 9 casos agudos de enfermedad de Chagas y actualmente se reportan 73 casos.
En lo que corresponde a casos crónicos, en el 2022 se reportaron 600 casos, pero de enero a septiembre de 2023 ya suman 674 casos.
Por esta enfermedad Puebla se ubica en el último sitio dentro del top 10.
Actualmente, no hay vacuna contra la enfermedad de Chagas, por lo que el tratamiento consiste en la administración de antiparasitarios que deben ser aplicados al comienzo de la infección para su mayor eficacia.
Para confirmar el diagnóstico, la posible persona infectada deberá realizarse un análisis de sangre.
Métodos de prevención y control para la enfermedad de Chagas:
Acudir al Centro de Salud más cercano en caso de identificar alguno de los síntomas arriba señalados y evitar la automedicación.
La enfermedad lleva el nombre de Carlos Ribeiro Justiniano Chagas, el médico e investigador brasileño que la descubrió en 1909.