A Puebla no le falta nada, tiene pueblos mágicos, hermosos paisajes, tradiciones ancestrales, una amplia gastronomía y, por su puesto, danzas típicas que resultan ser alegres y coloridas.
A pesar de que han pasado varios siglos, aún existen comunidades que guardan sus tradiciones y siguen haciendo este tipo de representaciones, tanto prehispánicas como religiosas. A continuación, te presentamos los bailes más emblemáticos de Puebla.
Esta danza es originaria de Cuetzalan, aunque también se celebra en las fiestas de San Miguel Tzinacapan.
Este baile recibe su nombre debido al uso de plumas de quetzal para confeccionar el penacho. Su demás vestimenta es de color rojo con listones, huaraches de pata de gallo y sonajas.
Es considerada como patrimonio cultural inmaterial de la humanidad por la UNESCO en el año 2009.
En esta danza participan hasta cuarenta personas con elementos precolombinos y coloniales, en donde la figura principal es el tecuan, tecuani o tecua (jaguar, “el devorador de hombres”).
Dicha danza es originaria del municipio de Acatlán de Osorio y sus raíces son de la cultura olmeca.
Actualmente, se baila durante un promedio de una hora o máximo hora y media.
Sólo se baila durante un día, aunque la danza completa se compone de treinta y seis sones hasta finalizar con la muerte del tecuan.
La danza de los Migueles es una representación de la lucha entre el bien y el mal, en la que los Migueles son la personificación del Arcángel Miguel.
Tiene su origen en la comunidad de San Miguel Tzinacapan, ubicada en el pueblo mágico de Cuetzalan.
Esta danza es parte de la celebración que se lleva a cabo en los días del 28 al 30 de septiembre en esta comunidad.
Esta danza es originaria de los estados de Veracruz, Hidalgo y Puebla.
Representa la matanza de una víbora, pero su simbología va más allá, pues esta tradición expresa el maltrato que vivieron los esclavos negros que fueron traídos a México por medio de los españoles
Esta danza también tiene un gran valor religioso, pues se cree que quien participe debe representarla mínimo durante cuatro años consecutivos. En caso contrario, se piensa que tendrá repercusiones en su vida.
Es muy popular en el municipio de Ixtepec.
Esta danza es un ritual al maíz y representa la caza del pájaro carpintero y el tejón, los cuales dañan las cosechas.