Víctor Sánchez Espinosa, arzobispo de Puebla, ofició la misa de este domingo en memoria de los tres agentes ministeriales asesinados en la balacera registrada el 19 de noviembre en el municipio de Tecamachalco.
Durante la ceremonia encabezada en la Catedral de Puebla, expresó su cercanía y cariño a las familias ahí presentes.
“Hace ocho días estaba yo en la misa dominical donde les ofrecían un homenaje, por eso quise que hoy toda la comunidad poblana, reunida en nuestra iglesia madre, pidiéramos a Dios nuestro señor por ellos”, dijo.
“Son hermanos que han perdido la vida por la violencia tan terrible que estamos viviendo, y son familias que ahora los extrañan, los sienten. Mi cercanía pues con los amigos y familiares, que sé que están aquí, familiares de los tres hermanos José Adrián Muñoz Huerta, José Guillermo Méndez Arellano y Miguel Sánchez Rosas”, expresó.
El arzobispo de Puebla también mencionó su cercanía a la Fiscalía General del Estado de Puebla, y al fiscal Gilberto Higuera Bernal.
Subrayó que hoy vivimos luchas políticas, pobreza, injusticia, violencia, y muchos problemas que desaniman a la población, pero que hay que recordar que se debe estar a la altura de las circunstancias.
En el primer domingo de adviento, que marca el calendario de la iglesia católica, los familiares de los ministeriales asesinados acudieron a la Catedral de Puebla donde colocaron las fotografías de los agentes al pie del altar mayor.
En la homilía, el arzobispo también pidió por el eterno descanso del comunicador Javier López Díaz.