El último baile. El carnaval de Huejotzingo que era su vida terminó arrebatándosela.
Juan Cadena Presnos nació para ser huehue. Su máscara y él, según sus conocidos, eran uno mismo.
La sangre que corría en sus venas estaba diseñada para la danza.
Apenas empezó a caminar, cerca de los 2 años de edad, y Juan ya quería participar en el carnaval anual.
Sus padres, también participantes, no dudaron en alentarlo.
Desde esa edad, Juan empezó a participar y no hubo año, excepto el de pandemia por Covid-19, que no lo hiciera.
Aunque aún era pequeño, les pedía a sus padres los aditamentos de sus trajes.
Además, Juan cada vez le ponía más empeño a sus movimientos conforme al paso de los años.
De a poco iba agarrando más experiencia y a sus 10 años de edad ya era todo un danzante.
Juan se sentía pleno en el tema del carnaval, lo cual era reflejo del reconocimiento de sus familiares.
Una edición más del carnaval del municipio había llegado este 2023, donde Juan, a su 16 años de edad, danzó con todas sus fuerzas.
No sabía que el último día del festejo también sería el último día de su vida.
El impacto de una posta en el abdomen le quitó la vida ayer martes 21 de febrero al huehue que aún era menor de edad.
De acuerdo con las autoridades, Juan perdió la vida tras una riña ocurrida horas después de haber concluido el carnaval y no durante una batalla campal que se registró durante la celebración, donde participaron en estado de ebriedad huehues y asistentes.
Afirmaron que el menor danzante se encontraba sobre la calle Corregidora y la esquina con 5 de Mayo, en el Cuarto Barrio.
Juan, aseguraron, estuvo involucrado en una riña con otros danzantes que le dispararon una posta con sus mosquetones en el abdomen.
Las autoridades indicaron que el menor fue llevado por paramédicos al Hospital General de Huejotzingo, donde más tarde perdió la vida.
Las autoridades no han detenido a los responsables del hecho.