Estado

En bares de Puebla no matan a golpes, pero sí a balazos

En el 2022, cinco personas fueron asesinadas en este tipo de establecimientos en el estado

El pasado 8 de enero Antonio Monroy Jiménez fue asesinado al interior del restaurante bar La Polar | Foto: Archivo El Universal
11/01/2023 |09:33
Andrés Sánchez Pastén
RedactorVer perfil

En los bares de Puebla no matan a golpes, pero sí a balazos.

En el 2022, al menos cinco personas fueron asesinadas en este tipo de establecimientos.

Como lo documentó , un músico, de 33 años, realizaba una presentación el 14 de febrero por el Día del Amor y la Amistad dentro del Bar La Clamatika de la 24 Sur y la esquina con la 29 Oriente, en la colonia El Mirador de la capital de Puebla.

Tras descender de un vehículo, unos sujetos le dispararon en la clavícula desde afuera.

Los paramédicos que llegaron solo confirmaron la muerte del músico.

El 11 de junio, dos hombres estaban acompañados de una mujer al interior del Bar The Company ubicado en la zona centro del municipio de Tehuacán.

Tras una discusión, los sujetos se agarraron a balazos con otros que posteriormente escaparon.

Los paramédicos indicaron que uno de los hombres murió y al otro lo llevaron herido a un hospital.

Mientras que el 24 de julio, también en el municipio de Tehuacán, pero en el Bar El Potrero, un grupo de personas se encontraban conviviendo.

Unos sujetos que llegaron a bordo de una motocicleta les dispararon en múltiples ocasiones para posteriormente escapar.

En el lugar, tres de las personas atacadas perdieron la vida.

Cabe mencionar que, el pasado domingo 8 de enero, Antonio Monroy Jiménez, de 59 años, fue asesinado al interior del restaurante bar La Polar, ubicado en la colonia San Rafael de la Ciudad de México.

La Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México informó que detuvo a un sujeto que presuntamente participó en la agresión.

Según las primeras investigaciones, el comensal fue asesinado por personal del establecimiento por presuntamente reclamar un cobro excesivo y no querer pagar una propina de más del 50 por ciento.