En el estado de Puebla, 12 de cada 100 personas son adultas mayores, y en 2050, serán 21.
De ese grupo poblacional, más de un tercio trabaja y poco más de la mitad se autodescribe como indígena.
Lo anterior se desprende de una investigación del Observatorio de Salarios de la Universidad Iberoamericana de Puebla, donde se destaca que, mientras a nivel nacional una de cada diez personas está pensionada, en la entidad apenas se alcanza el 4.2 por ciento.
Esto explica los altos índices de personas mayores con empleo. Sin embargo, los indicadores de falta de ingresos son mucho más drásticos: a nivel nacional, el 57 por ciento no trabaja, mientras que en Puebla el porcentaje es de 61 por ciento.
Además, el 15.6 por ciento a nivel nacional y el 18.6% de los trabajadores en Puebla, lo hacen sin goce de sueldo.
En el estudio se refiere que hay más adultos mayores en condición de pobreza en el estado (66.3 por ciento) que en la media nacional (54.6 por ciento).
A ello, contribuyen los altos índices de analfabetismo (36.7 por ciento) y escolaridad mínima: la mitad de la población de la tercera edad sólo tiene la primaria terminada.
Con respecto al acceso a servicios de salud, el Observatorio de Salarios encontró que tres de cada cuatro adultos mayores tienen seguridad social. Sin la presencia y correcto funcionamiento de instancias como el Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI), las cifras se desplomarían hasta el 34 por ciento a nivel nacional y 18 por ciento en Puebla.
El director del Observatorio de Salarios, Miguel Calderón Chelius, enfatizó la necesidad de contar con cruzadas de salud integral que garanticen una vida digna.
Dijo que los hábitos personales se forman en entornos determinados, por lo que la vejez se convierte en una problemática social que debe ser atendida desde ejes de escolaridad, salud integral, empleo y seguridad.
“No nos olvidemos: todos vamos a pasar por ahí (la vejez)”, advirtió.