El gobernador Miguel Barbosa Huerta informó que el asesinato de nueve personas –seis hombres y tres mujeres- en Atlixco, fue una ejecución entre bandas del narco.
Durante la videoconferencia de esta mañana, dijo que por los primeros datos que se obtuvieron, el lugar donde ocurrieron los hechos era un centro de distribución de droga, en una colonia de clase media.
“Hasta ahorita, la investigación con la que se cuenta no revela la identificación de los ejecutados, pero al parecer no son de Atlixco ni son poblanos. Fue una ejecución entre bandas de personas que llegaron a Atlixco a cometer delitos de narcomenudeo y muchas otras cosas”, dijo.
Barbosa Huerta también dio a conocer que hay un sobreviviente, quien permanece hospitalizado tras presentar heridas de bala en la cabeza, pierna y hombro, por lo que su estado de salud es grave.
Añadió que ya se reportó este hecho a la mesa de seguridad nacional, y la Secretaría de Seguridad Pública federal enviará al director de la Comisión Nacional de Secuestros para indagar sobre este caso.
Sin embargo, aclaró que no vienen a hacerse cargo de la seguridad en el estado sino que fue una solicitud de su parte para apoyar en las investigaciones.
“Yo lo he dicho, el 2022 va a tener complicaciones muy importantes en materia de seguridad y la lucha entre grupos delincuenciales va a ser la característica. Nuestra obligación es proteger a la población y combatir a la delincuencia”, citó, al mismo tiempo que aseguró que el gobierno estatal no se verá rebasado por las bandas criminales.
El gobernador señaló que son los cárteles nacionales los que introducen la droga a Puebla, pero son los grupos delincuenciales locales los que se encargan de distribuirla.
“Tenemos grupos delincuenciales locales que están llegando a todos los estados, nosotros no nos vamos a guiar por si son segmentos de otros grupos nacionales, no. No nos van a rebasar”, acotó.
El mandatario estatal añadió que se va a investigar a fondo para saber quiénes fueron los ejecutados y de dónde vinieron. Además, consideró que la cercanía de Atlixco con el estado de Morelos y con Guerrero hace de esa zona un lugar complicado.
Elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional, Guardia Nacional, Policía Estatal, y de la Fiscalía General del Estado se mantienen en el lugar de los hechos.