Cuando hablamos de un día cero respecto al acceso al agua, nos referimos a un periodo en el futuro en el que no podremos suministrar o abastecer la cantidad de agua necesaria para la población de una ciudad.
En un análisis detallado del desafío que enfrenta el país, Mario Hernández, especialista del Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), menciona que el día cero podría llegar debido a múltiples factores que lo pueden provocar, como sequía, sobreexplotación de recursos hídricos y gestión inadecuada del agua.
Según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), México podría llegar al día cero en las próximas décadas si no se modifican los hábitos de uso y el desperdicio.
Nuestro país solo se encuentra detrás de Chile en la lista de países que consumen más agua de la que producen en Latinoamérica. Sin embargo, Hernández Hernández destacó la variabilidad de los problemas relacionados con el agua a lo largo del territorio nacional.
Según Hernández, México se puede dividir en tres zonas: el Noreste, el Centro y el Sureste, cada una con sus propias dificultades en términos de disponibilidad y calidad del agua.
En el caso de Puebla, el Instituto de Recursos Mundiales (WRI) reveló que esto se debe al crecimiento desmedido de la población, la contaminación de los ríos y la baja recarga de mantos acuíferos.
Aunado a esto, Alberto Moreno Gómez Monroy, presidente de la Cámara Nacional de Promoción y Desarrollo de la Vivienda (Canadevi) en marzo de 2024, declaró que en un lapso no mayor a siete años podría agravarse el desabasto de agua potable en la zona metropolitana de Puebla
Para evitar el día cero en Puebla, es esencial implementar medidas drásticas y estrategias a largo plazo. Esto incluye invertir en infraestructura para la recolección y reciclaje del agua, fomentar el uso eficiente del agua entre la población y las industrias, y establecer políticas que promuevan la sostenibilidad y la conservación del recurso hídrico.