El gobierno del estado de Puebla autorizó la reapertura de guarderías, tras el cierre por más de un año ocasionado por la pandemia de Covid-19. El personal que las atiende asegura que cumplen con todos los protocolos sanitarios para poder garantizar el buen estado de salud de los pequeños durante su permanencia en estos espacios.
El 27 de abril del 2021, debido a la disminución de contagios, la Secretaría de Gobernación determinó permitir el reinicio de actividades en las guarderías y estancias infantiles de todo el estado, las cuales deben operar con un aforo del 30 por ciento.
El Universal Puebla visitó una estancia para conocer los protocolos que llevan a cabo para el cuidado de la población infantil.
Gabriela Betancur, directora de la estancia infantil Las Ardillitas, ubicada en calle Cholula de la colonia Independencia, narró parte de las medidas de higiene y sana distancia que se siguen en este espacio.
En entrevista, explicó que cualquier persona que ingresa a las instalaciones pisa el tapete sanitizante, incluyendo los niños que ya lo pueden hacer. Además, se les rocía de sanitizante y se les toma la temperatura.
Durante 20 segundos se lavan las manos con agua y jabón, se secan las manos con toallas de papel, se les aplica gel antibacterial y les cambian la ropa y los zapatos por su uniforme.
“Parte del protocolo es cambiarles la ropa y zapatos, ya que algunos padres hacen uso del transporte público o llegan caminando desde su casa. Las maestras y personal que aquí labora también se cambian ropa y zapatos de calle, por sus uniformes”, explicó.
Cada niño cuenta con una bitácora sobre las condiciones en las que es recibido y durante su estancia en la guardería se le vuelve a tomar la temperatura en dos momentos más.
Las instalaciones se limpian una vez que concluyen las labores y al siguiente día, cuando abren sus puertas nuevamente, esterilizan áreas de juego, cocina, sala de aprendizaje y comedor.
“Ellos saben que es importante mantener su distancia y usar el cubrebocas para evitar el contagio y lo han entendido muy bien. Los grupos son reducidos, saben que no deben tocarse entre ellos y ahora en las rondas trabajamos tomando sus distancias”, señaló.
En el caso de los papás, deben traer su propio lapicero para firmar la bitácora diaria, no llevar a los niños a sitios concurridos, y en caso de presentar algún malestar, consultar al médico y mostrar el certificado o el alta para poder regresar a la guardería.
Además de acondicionar algunos espacios mediante el uso de mamparas, las guarderías y estancias infantiles, así como padres de familia, han tenido que invertir para la compra de insumos como jabón, sanitizantes, tapetes y cloro.
Guadalupe Guarneros, presidenta de la asociación civil Formando con el Corazón, aseguró que en las 40 estancias infantiles que tienen afiliadas en todo el estado, se ha capacitado a todo el personal para poder cumplir con todos los protocolos.
“La pandemia fue una etapa de crecimiento, conocimiento, de perseverancia, ya que nunca habíamos vivido algo así. Por lo tanto, era necesaria la capacitación y tomar todos los cursos que brindó la Secretaría de Salud”, refirió.
Informó que estos espacios cuentan con el código QR de salubridad que piden las autoridades para poder autorizar la reapertura y con la certificación S0435 especial para la atención de niños.
“Como cualquier ciudadano, estamos tratando de acatar todo lo que nos solicitan, y dentro de nuestras posibilidades seguir buscando opciones para poder cumplir de la mejor manera, sobre todo por el compromiso que tenemos con los papás, quienes tienen que salir a trabajar”, dijo.
En Puebla, la Secretaría de Educación Pública tiene un registro de 450 estancias infantiles particulares en todo el estado, 202 de las cuales se localizan en la ciudad de Puebla.
Además, hay 16 guarderías subrogadas por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
