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Crear una nueva moneda en Latinoamérica, piden líderes del Grupo de Puebla

Concluyeron sus trabajos con una agenda internacional en la cual también abordaron temas como los bloqueos económicos, la crisis climática y la desglobalización

El Grupo de Puebla se reunió durante tres días en la capital poblana | Agencia Es Imagen para El Universal Puebla
01/10/2023 |17:47
Angeles Bretón
RedactorVer perfil

Los líderes de 21 países de Latinoamérica y del Caribe, durante dos días de trabajo en la ciudad de Puebla, celebraron el IX Encuentro Oficial de Grupo de Puebla 2023, bajo el eslogan “En unidad avanzamos”.

Durante la ceremonia de clausura, Silvina Romano, del Consejo Latinoamericano de Justicia y Democracia (CLAJUD), dio lectura a las conclusiones a las que llegaron durante las mesas de trabajo.

En este encuentro se contó con la participación de expresidentes como Evo Morales, de Bolivia; Rafael Correa, de Ecuador; Ernesto Samper, de Colombia; las diputadas María José Pizarro, de Colombia; Karol Cariola, de Chile; el jurista Baltasar Garzón; Delcy Rodríguez, vicepresidente de Venezuela, así como representantes de Cuba, Panamá, Guatemala, Brasil, Argentina y México, entre otros.

Al leer las conclusiones llamaron a:

-La integración regional para defender la autonomía, dignidad y seguridad material de los pueblos de Latinoamérica y del Caribe, destacando la reactivación de Unasur (Unión de Naciones Suramericanas) y el rol de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC).

-La coordinación de diferentes organismos subregionales y la creación de una nueva arquitectura financiera, adaptada a las necesidades de la región, incluyendo la propuesta de una moneda única para avanzar en la desdolarización y una nueva institucionalidad para manejar las necesidades financieras.

-Reemplazar el modelo neoliberal por uno solidario de desarrollo, enfocado en la inclusión social, la generación de valor, la transición ecológica, una institucionalidad social y la construcción de una nueva ciudadanía democrática.

-Actuar de frente a la crisis climática y exigir a los países desarrollados que ratifiquen los protocolos y acuerdos globales del cuidado medioambiental y apostar por la promoción, difusión y acciones que permitan la concreción de los acuerdos de esta sur.

-Llamado a Ucrania y Rusia para decretar un cese temporal del fuego y explorar la posibilidad de un diálogo en busca de la paz, siguiendo las propuestas de varios líderes internacionales como Luiz Inácio Lula da Silva y el Papa Francisco.

-Llamado a que los gobiernos progresistas impulsen medidas para erradicar todas las formas de violencia contra las mujeres y promuevan la equidad de derechos y oportunidades con perspectiva feminista.



-Denuncian el “lawfare” o la judicialización política que continúa suprimiendo a los gobiernos progresistas de la región, las medidas coercitivas contra Venezuela y Cuba, ya que no solo son actos que violan la Carta de Derechos Humanos, sino que significan una declaración de guerra y actos subsecuentes que golpean a los más vulnerables.

- Advirtieron que los medios de comunicación suelen ser utilizados por la ultraderecha para criminalizar a líderes de izquierda y a sus familias.

Por su parte, Karol Cariola, fundadora de Grupo de Puebla y diputada de Chile, expresó que los más de cien líderes que participaron en esta cumbre expresaron su preocupación por lo que ocurre en Guatemala con el desconocimiento de las elecciones vinculadas con el presidente electo Bernardo Arévalo de León, quien también asistió a este encuentro en Puebla.

También analizaron temas preocupantes en Perú y expresaron todo su impulso por los procesos de paz en Colombia, en la guerra entre Ucrania y Rusia y un llamado explícito por la paz.

De los casos de lawfare señalaron gran interés en la judicialización de la política y persecución que han vivido en Chile, en Ecuador y Argentina y Brasil en contra de líderes de izquierda en América Latina.

En las mesas plenarias que se celebraron a puerta cerrada abordaron lo que calificaron como el gran desafío de los países progresistas, “enfrentar a la extrema derecha en el Continente y en el mundo,

así como el desarrollo de estrategias para la defensa”.