El nuevo Congreso de Puebla, cuyas obras ya iniciaron y se van a inaugurar a finales del primer semestre de 2024, es un proyecto novedoso que se ha planteado como respetuoso del paisaje.
Lo anterior es relevante, pues se encuentra en la zona histórica de acceso a Los Fuertes de Loreto y Guadalupe.
Al igual que otras obras que se han realizado en la Zona Cívica del 5 de Mayo, requirió del aval del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) por tratarse de un área protegida.
Tras la colocación de la primera piedra del proyecto, ocurrida el viernes 7 de julio, el gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina expuso que la idea original implicó varios cambios por las indicaciones de especialistas en la preservación del patrimonio.
Aunque la maqueta original de la obra se hizo en la administración del ex gobernador Miguel Barbosa Huerta, el proyecto finalmente fue modificado en un 70 por ciento para cumplir con las especificaciones requeridas e ir a la vanguardia.
Pero ¿qué es lo que cambió y por qué es un proyecto que respeta el paisaje del sitio histórico?
Se trata de una obra que consta de una planta sobre la superficie y cuatro sótanos hacia abajo.
Sobre el techo habrá áreas verdes para integrarse al paisaje y no alterar la imagen del cerro ni la altura de los inmuebles construidos a su alrededor.
Para lograr la iluminación hacia los sótanos, el diseño prevé un área triangular para filtrar luz luz natural y en el interior se estima que albergue a 500 personas, incluidos a los diputados, así como 217 cajones de estacionamiento.
Tendrá una plaza cívica, un comedor y su construcción tendrá forma de una L.
Además, captará el agua de lluvia, tendrá planta de tratamiento para potabilizarla y tendrá instalación fotovoltaica.
El total de la superficie es de 25 mil metros cuadrados y además de los diseños verdes en el techo, se sembrarán 2 mil 90 nuevas especies.
Las mismas serán principalmente pinos y ocotes, que implicarán una diferencia frente a eucaliptos sembrados en el cerro, ya que por no ser endémicos han dañado el subsuelo.
En cuanto a los materiales que se han anunciado, destaca la piedra originaria del municipio de Tepeaca y que también contará detalles de talavera que representa a Puebla.
El diseño está a cargo del despacho del arquitecto José Francisco Serrano, quien fue el responsable de la Terminal 2 del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y la obra tendrá un costo máximo de 770 millones de pesos.