La temporada de calor puede impactar en las mascotas de manera significativa.
En los perros puede llegar a presentarse una temperatura cercana a los 42 grados que puede considerarse una hipertermia, alertó Luis Arturo Flores Alonso, jefe de médicos del Hospital Veterinario de la UPAEP.
El catedrático en la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP) dio a conocer que hay muchos factores que pueden desencadenar y elevar la temperatura en las mascotas, lo que es más difícil regular.
Dijo que en esta temporada la temperatura corporal en las mascotas se incrementa, principalmente en los perros, quienes en condiciones normales presentan entre 38.5 a 39.5 grados.
El incremento de los niveles en el termómetro dependerá si la mascota registra una baja actividad, camina bajo los rayos del sol o se encuentra dentro de un vehículo.
Los perros pueden regular su temperatura de tres formas: mediante el jadeo, a través de los “dedos de las patas” en donde se encuentran las glándulas sudoríparas y la zona donde hay baja cantidad de pelo, es decir, en el abdomen.
Dijo que cuando la temperatura se rebasa, entra el proceso chocalórico en los perros, padecimiento que es muy común en estas fechas.
Este proceso -dijo- muchas veces se da por descuido de los propietarios que no brindan espacios para que las mascotas puedan autorregular la temperatura.
“Es común observar perros en las azoteas de las casas o cuando saca uno a las mascotas a las 2 o 3 de la tarde en pleno rayo del sol a caminar, en zonas donde predomina el concreto. A esto se suma que los dueños de las mascotas no llevan agua para refrescar a la mascota”, explicó.
De no cuidar la temperatura de los peluditos, el especialista dijo que se pueden presentar algunas complicaciones súbitas o permanentes.
Las súbitas son: puede fallecer y presentar jadeo constante, provocando que el animal se rehúse a caminar o hacer su actividad física de forma normal.
Como consecuencias permanentes son: fallas renales, hepáticas y neurológicas que se presentan a largo plazo, hasta convulsiones.
La recomendación del especialista es cuidar que las mascotas estén en lugares frescos, que tengan sombra y evitar tenerlos en pleno rayo de sol o en los automóviles con las ventanillas cerradas, mantenerlas hidratadas, termorregular la temperatura poco a poco, colocarles compresas frías en el abdomen o mojar los dedos de las patas.
En caso de que el problema se agudice, es importante llevarlo con el médico veterinario para una atención adecuada.