Por segundo año consecutivo, la Feria de Puebla no se llevará a cabo debido al Covid-19, pandemia que ha obligado a las autoridades estatales a evitar eventos que motiven la aglomeración de personas y la consecuente propagación de contagios.
De acuerdo con datos reportados antes de la contingencia sanitaria, este evento que se realizaba en el marco de los festejos del 5 de Mayo, reunía en promedio a más de 1 millón de visitantes regionales, nacionales e internacionales, y generaba una derrama económica de 490 millones de pesos.
Su cancelación afecta principalmente a los comercios de la zona, que cada año esperaban la Feria para incrementar sus ventas entre un 30 y 100 por ciento.
Ulises Sánchez, junto con su familia, es propietario de un supermercado ubicado a dos calles del Centro Expositor y de Convenciones en la zona histórica de Los Fuertes.
Relató que sus ganancias se han estancado, ya que el dinero que obtenían durante la feria lo ocupaban para resurtir la tienda.
Para este año, confiando en que habría feria en mayo, había planeado abrir otro supermercado en otro punto de la ciudad. Pero el proyecto tendrá que esperar un año más, con la confianza que todo vuelva a la normalidad en el 2022.
El taxista Luis Javier Báez Torres, quien desde hace seis años hace base en las calles Ejército de Oriente y Jacarandas, dice que sus ingresos disminuyeron un 60 por ciento en el último año debido a que no hay clases presenciales.
Aseguró que la feria de Puebla representaba para esta central de taxis un aumento del 100 por ciento en sus percepciones.
“Con los decretos que ha sacado el gobernador no podemos trabajar al 100 por ciento, porque la multa está muy alta y no conviene arriesgarse a ponerse a trabajar en la madrugada. El gobernador no pensó en gente que sale a trabajar temprano o que necesita un taxi en la madrugada para ir a la Capu o a un destino. Nosotros antes de las 10 (de la noche) ya no podemos trabajar. No podemos decir que estamos juntando dinero, estamos sobreviviendo”, dijo.
La feria también es un atractivo para los turistas, por la variedad de eventos culturales y artísticos que aquí se reúnen, además de que sirve de escaparate para los artesanos de las diferentes regiones del estado.
La generación de empleos directos e indirectos se cuantificaban en miles porque a lo largo de un mes se contratan elementos de seguridad privada, cargadores, vendedores, acomodadores, elenco artístico, taxistas y conductores de servicios de transporte por plataforma, cocinas económicas, vendedores ambulantes, taquilleros y demás personal que se ve involucrado en el palenque, corrida de toros y juegos mecánicos, por mencionar algunos casos.
Hasta la edición de la feria 2019, se otorgaron en promedio 400 espacios a comerciantes de todo tipo de giros, con rentas desde 15 mil hasta 35 mil pesos para instalarse en el Centro Expositor y de Convenciones de Puebla.
