En el marco de las investigaciones por el hallazgo del bebé Tadeo y la detención de 21 funcionarios del penal de San Miguel, elementos de la Policía Estatal controlan la entrada y la salida de este reclusorio.
Los uniformados piden su documentación tanto a visitantes como a trabajadores del Centro de Reinserción Social (Cereso) ubicado en la colonia Lomas de San Miguel de la capital de Puebla.
Posteriormente, tras una rigurosa revisión, permiten el acceso a las personas, ya sea a pie o abordo de algún automóvil particular.
El Universal Puebla constató que los agentes mantienen bajo resguardo el inmueble al que llegaron desde la noche de ayer lunes 24 de enero, tras el traslado ante el agente del Ministerio Público de los directivos y custodios del penal involucrados en el caso del pequeño Tadeo.
Afuera, los familiares de los internos se mantienen a la expectativa, pero prefieren no comentar lo ocurrido.
La cárcel estatal se encuentra en el ojo del huracán desde el 10 de enero pasado, tras el hallazgo del cadáver de Tadeo dentro de un contenedor de basura, luego de que fuera exhumado del panteón de San Nicolás Tolentino en la delegación Iztapalapa de la Ciudad de México.
Mientras las investigaciones aún siguen en curso para determinar quién lo exhumó, lo trasladó a Puebla y lo introdujo al penal, el gobierno estatal comenzó a hacer una limpia al interior de este reclusorio.
Este martes se designó a una nueva directora, cuyo nombre no ha sido revelado hasta el momento.
El lunes 24 de enero, el gobernador Miguel Barbosa designó como nuevo titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) estatal a Daniel Iván Cruz, así como a Jorge Pérez a cargo de la Subsecretaría de Centros Penitenciarios.