En la ciudad de Puebla hay una red de cámaras de vigilancia que opera las 24 horas al día, convirtiendo a la capital del estado en un Big Brother. ¿Sabes cuántas camaras viglan las calles? Aquí te lo contamos.
Estas cámaras forman parte de la red estatal conectada al C5, el sistema de seguridad y monitoreo del estado, diseñado para prevenir delitos y responder rápidamente ante incidentes.
La red de videovigilancia cuenta actualmente con alrededor de 2,500 cámaras instaladas en puntos estratégicos para monitorear las calles y garantizar la seguridad pública.
¿Dónde están ubicadas estas cámaras de videovigilancia?
Las cámaras están distribuidas principalmente en el Centro Histórico y otras zonas clave de la ciudad. El monitoreo cubre áreas de alta afluencia y puntos críticos, lo que permite una vigilancia constante de las calles.
Además, el "Plan Centinela" de la actual administración busca involucrar a la iniciativa privada para ampliar la cobertura de videovigilancia, incluyendo cámaras adicionales en la zona metropolitana de Puebla.
Esta colaboración pública-privada tiene como objetivo fortalecer la seguridad en toda la región.
Aunque en el último informe de gobierno del ex alcalde Adán Domínguez se anunciaba que la red había superado las 2,000 cámaras, un análisis reciente reveló que muchas de estas cámaras ya no están habilitadas.
A nivel estatal, la situación es más amplia: más de 8,000 cámaras están operando en toda la entidad, formando parte del sistema C5i, que incluye cámaras instaladas en patrullas, dispositivos corporales de los policías y en espacios públicos.
Este sistema no solo se enfoca en la seguridad, sino también en la protección de derechos humanos, ya que registra los operativos y detenciones, garantizando mayor transparencia en las acciones de seguridad pública.
¿Cuál es el nuevo circuito de vigilancia en Puebla?
El 27 de octubre, el presidente municipal, Pepe Chedraui pidió a los dueños de bares que sus cámaras se conecten al DERI para velar por la seguridad de los ciudadanos.
En entrevista, puntualizó que tras la desaparición de Luis Ángel Hernández quien fue visto por última vez en el bar “Una y ya”, buscarán tener un acercamiento con los dueños de este tipo de establecimientos para armar un circuito de vigilancia.
Agregó que ya han tenido contacto con algunos empresarios para buscar vincular sus cámaras de videovigilancia obteniendo respuestas favorables.
En resumen, la capital poblana se encuentra en una etapa de reestructuración y mejora en su sistema de videovigilancia, buscando una mayor colaboración tanto pública como privada para garantizar un monitoreo efectivo en sus calles.