El pasado 5 de mayo, el gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina anunció la Línea 4 de la Red Urbana de Transporte Articulado (RUTA) que recorrerá el Periférico Ecológico, con la que también se podría poner fin a los taxis piratas.
Pese a la informalidad, los riesgos y hasta los altos costos de los taxis piratas, se trata de una opción utilizada con regularidad por usuarios de transporte público que se mueven entre Parque Finsa y Ciudad Universitaria.
El problema inició el 2 de octubre de 2013 cuando la línea Bicentenario que recorría esta vialidad registró el choque de una de sus unidades donde murió un pasajero y hubo alrededor de 60 heridos.
A partir de entonces, el gobierno estatal decidió retirar la concesión a esa ruta.
El 7 de diciembre de 2016, la administración estatal anunció el relanzamiento del proyecto como Línea Periférico para atender a 16 mil usuarios en un recorrido con 52 paradas y un plan inicial de 27 unidades.
Aprovechando el contexto y el aumento de la demanda, comenzaron a operar los taxis piratas que son automóviles particulares empleados como colectivos que cobran una cantidad por pasajero, pero sin ninguna seguridad.
Pese a que operan de manera informal, estos taxistas están bien organizados, pues tienen “checadores” que se comunican con los transportistas vía telefónica para cubrir ciertos puntos donde hay más demanda y alertar sobre operativos.
Además, tienen paradas específicas donde los usuarios se van formando y los vehículos van pasando hasta quedar completamente llenos.
El cobro mínimo que realizan entre una parada y otra es de 10 pesos, como en la Línea Periférico. Cuando recorren más de una parada, el precio se va incrementando de 5 en 5 pesos.
Incluso, se llegan a acordar viajes más largos como de Cuautlancingo y San Pedro Cholula a la zona del Fraccionamiento los Héroes con cobros de más de 50 pesos si trasladan a más de un pasajero.
Sin embargo, los fines de semana el servicio es deficiente, pues circulan pocas unidades.