Ahora que se viven las fiestas de Navidad y Año Nuevo, el espíritu de la bondad y compasión flota en el aire, por lo que la historia de Oso, un lomito rescatado, puede provocarte una que otra lágrima.
Oso, como fue nombrado por el personal del Instituto de Bienestar Animal de la Secretaría de Medio Ambiente, Desarrollo Sustentable y Ordenamiento Territorial (Smadsot), es el protagonista de una hermosa historia de amor, después de meses de sufrimiento.
Todo comenzó el 25 de mayo de 2019, cuando se conoció del maltrato que sufrió el perro por parte de un hombre, quien estando en una de las calles del municipio de Chalchicomula de Sesma, decidió arrojarle gasolina y prenderle fuego.
Tras esta agresión, el sujeto solo se carcajeó con sus amigos, quienes fueron cómplices por omisión porque no hicieron nada para evitar el maltrato del animalito de cuatro patas, que su única culpa fue jugar con ellos.
Gracias a una denuncia que presentó la asociación civil Cometa Serdán, personal del Instituto de Bienestar Animal aseguró al peludito y desde entonces iniciaron un camino para lograr salvarlo y rehabilitarlo.
El trabajo era mucho, pues el fuego le provocó quemaduras de segundo y tercer grado en el 40 por ciento de su cuerpo, principalmente en patas traseras y cola.
Después de una larga recuperación y trabajo dedicado de los médicos, quienes no dejaron de cuidar cada una de las heridas de su cuerpo, Oso dio muestras de querer vivir y salir adelante.
Aunque temeroso de los hombres, pero al mismo tiempo agradecido, Oso entró al programa de Adopción Responsable y una linda familia le brindó una segunda oportunidad.
Las marcas de las lesiones aún son visibles en sus patas, pero eso no es impedimento para dar amor a su nueva familia, en su mayoría compuesta por tres jóvenes mujeres.
“Oso vive feliz a lado de su familia. Tú puedes ser parte de este cambio formando parte del programa Adopción Responsable”, informó el Instituto de Bienestar Animal, del gobierno del estado.
A tres años de lo ocurrido, lamentablemente la autoridad estatal no ha dado a conocer cuál fue el castigo que se le fincó al presunto responsable, que, de acuerdo con Cometa Serdán, está plenamente identificado, ya que no es la primera vez que cometía un acto así.
Entre los comentarios en redes sociales también se lee que el trabajo del Instituto de Bienestar Animal no está completo, toda vez que no hay sanción alguna en este caso, a pesar de tener todos los elementos para proceder.
“Oso se salvó, pero sin sanción habrá siempre más osos sin salvación y más malnacidos que seguirán quemando y maltratando a muchos animales sin que nadie los castigue. Su trabajo está sin terminar”, se lee entre los comentarios.
Sanciones por maltrato animal en Puebla
Cabe recordar que en Puebla el maltrato animal está tipificado como delito y existe una Ley de Bienestar Animal estatal en la que se establecen las penas para quien incurra en estas faltas.
Como cárcel de seis meses a dos años a quien realice actos de maltrato o crueldad en contra de cualquier animal con intención de ocasionar dolor, así como una multa de 50 a 100 días de salario mínimo, equivalente de 12 mil 815 pesos a 25 mil 630 pesos.
De uno a cuatro años de prisión y multa de 100 a 200 días de salario mínimo, cuando las lesiones pongan en peligro la vida del animal.
Si los actos de crueldad provocan la muerte del animal, las sanciones aumentan de dos a cuatro años de prisión, así como una multa de 200 a 400 días de salario.
