El 19 de septiembre de 2017, México vivió un trágico episodio por el sismo de 7.1 grados que sacudió parte del país y que ocurrió exactamente 32 años después del terremoto de 1985.
De acuerdo con el sitio oficial del Gobierno de México, la Ciudad de México registró 228 decesos, Morelos 74, Puebla 45, el Estado de México 15, Guerrero 6 y Oaxaca uno. Mientras que el costo de las afectaciones fue estimado en 61 mil 143 millones de pesos.
En el informe de Gobierno del Presidente de la República 2017-2018, se reportó que Puebla fue el segundo estado con mayor avance en la reconstrucción de infraestructura y el primero en aplicar los recursos del Fondo de Desastres Naturales (FONDEN). Además, se crearon Centros de Mando que permitieron abarcar por regiones a los municipios afectados.
La entonces Secretaría de Desarrollo Social contabilizó 28 mil 841 viviendas afectadas en Puebla. El presupuesto requerido fue de $ 1 727 296 588. 96, las inversiones hacia noviembre de 2018 fueron de 540 millones 851 mil 790.98 pesos por parte del Estado y de 889 millones 506 mil 796.70 pesos de la Federación.
Otro esfuerzo relevante fue el relacionado con infraestructura educativa pues cada 24 horas se rehabilitaron 3.6 escuelas; en total, mil 173 planteles fueron intervenidos.
De igual forma se atendieron aspectos como las infraestructuras carretera, hidráulica y acuícola; el patrimonio histórico y religioso; las micro, pequeñas y medianas empresas. Uno de los rubros más sensibles fue el hospitalario, de 96 unidades médicas afectadas al menos 94 fueron reconstruidas.
Se hizo uso de una póliza aseguradora por 236 millones para la entrega de apoyos estatales como parte de un convenio suscrito entre el Gobierno del Estado y el Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros, Sociedad Nacional de Crédito, Institución de Banca de Desarrollo “BANSEFI”.
A cinco años de distancia, la huella de este suceso natural está presente cada septiembre. Los recuerdos tocan el corazón de las familias de las víctimas y de quienes perdieron todo por lo que trabajaron durante años. Pero también queda latente la solidaridad de la sociedad civil, la obligación y compromiso de autoridades.
