Luego de una baja del 80 por ciento de los usuarios por el periodo de confinamiento a causa del Covid-19, el sector transportista nunca regresará a tener el número de usuarios previos a la pandemia, expresó Nicolás Rosales Pallares, presidente de la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad (AMTM).
En este contexto, cifras del Banco Mundial refieren que durante 2020, primer año de la pandemia por Covid-19, los operadores de transporte público en América Latina perdieron entre 380 y 400 millones de dólares mensuales.
En México, las pérdidas del sector se estiman en 28 mil millones de pesos entre abril y diciembre de ese año, y en 18 mil millones entre enero y septiembre de 2021, de acuerdo con reportes del Instituto de Recursos Mundiales (WRI, por sus siglas en inglés), lo que arroja un total de 46 mil millones.
Así lo expuso el presidente de la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad (AMTM), Nicolás Rosales Pallares, durante su participación en Expo-Transporte ANPACT, que se lleva a cabo en la ciudad de Puebla y tras participar en el panel Movilidad Segura, Eficiente y Sustentable.
En este espacio, los expertos en la materia debatieron sobre la importancia del desarrollo del transporte público en las ciudades, además del papel del transporte público tras la caída de usuarios y la llegada del home office que “llegó para quedarse”.
Al realizar un análisis del problema que enfrenta el sector, Rosales Pallares agregó que también afectó la creciente inflación calculada por especialistas en 7.65 puntos durante este 2020, lo cual impide la recuperación del sector.
Ello además de que el 87.8 por ciento de unidades que operan bajo la lógica del hombre-camión, que se encuentra atomizado y fragmentado y cuya única fuente de ingresos es la tarifa, considerada la más baja del mundo.
Ante este escenario, el titular de la AMTM demandó la participación y el compromiso no sólo de todos los actores del sector, sino también de autoridades federales, estatales y municipales; bancas de desarrollo, proveedoras de bienes y servicios, consultores e Instituciones académicas, entre otras instituciones.
Dijo que los efectos económicos de la pandemia en el transporte público implicarán un cambio en el modelo de negocio, en la prestación del servicio (tanto en la oferta como en la demanda) y una reestructuración financiera, como medidas urgentes para garantizar la seguridad de usuarios y operadores.
“Estamos ciertos que este momento crítico se superará, pero debemos replantearnos cambios, no podemos seguir haciendo las cosas como siempre en el sector”, señaló durante su participación ante representantes gubernamentales, legisladores y empresarios del sector.
Expo-Transporte ANPACT es uno de los encuentros más importantes del sector, organizado por la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones, donde, además de analizar la problemática del transporte público y de carga, se presentan las mejores y últimas innovaciones en materia de tecnología.
En esta ocasión están orientadas hacia opciones sustentables, como unidades de diésel ultra bajo en azufre, con motores de alto desempeño y vehículos impulsados con energía eléctrica producidos en México.
