La Ley de Transporte del Estado de Puebla establece con claridad que los taxis locales no pueden exceder una antigüedad de siete años.
En su tercer párrafo, señala: “para el caso de los permisos del Servicio de Transporte Mercantil de Personas en su modalidad de alquiler o taxi local, deberán prestar el servicio con vehículos que no excedan de siete años de antigüedad”.
En consecuencia, los propietarios de esos vehículos están obligados a sustituirlos por otros nuevos o que tengan menos años de antigüedad, conforme a la normatividad aplicable.
Al respecto, de cara al 2025, en redes sociales comenzó a llamar la atención que saldrán de circulación todos los Tsuru que prestan el servicio de taxi en Puebla, ya que dicho vehículo salió del mercado en 2017, por lo que en 2024 cuenta con siete años de antigüedad.
En un caso similar, en cuanto a sus años de antigüedad, se encuentran los modelos Chevy, Chevy Corsa, Jetta Clásico, New Beetle, Clio Renault y Atos, que en 2024 cumplen siete años, y en consecuencia deberían dejar de prestar el servicio y ser sustituidos, para que el permiso correspondiente se mantenga vigente.
Ante este panorama, es claro que, a partir del padrón de concesionarios y vehículos que posee la Secretaría de Movilidad y Transporte, debiera ser una labor controlada y programada.
Sin embargo, falta que la dependencia de la administración estatal oficialice la forma en la que operará el programa de sustitución vehicular, los plazos y, en su caso, las facilidades que puedan otorgarse.
En general, las reglas que operan en la materia tienen como propósito garantizar que el servicio de taxi en Puebla se brinde con unidades en buenas condiciones, tanto físicas como mecánicas.