Desde muy pequeña, al ver a sus primos mayores jugar, le gustó el tenis de mesa, una disciplina que practica desde los nueve años de edad.
Ella es Lucía Fernández Regil, la poblana que a sus 20 años ha conquistado diversos campeonatos nacionales en dicha disciplina deportiva, y su meta principal es llegar a unos Juegos Olímpicos.
En entrevista con El Universal Puebla refirió que el deporte enseña valores, como el ser disciplinado.
“Es algo bueno para su cuerpo, están haciendo algo que les gusta y seguramente tendrán experiencias que nunca las van a olvidar y también personas que se vuelvan importantes. El deporte es una inversión y no lo vean como un gasto para su vida”, expresó.
Su meta -en un futuro inmediato- es entrar a la selección mexicana de tenis de mesa.
“Ya he estado cerca de estar dentro, he sido la reserva, pero a partir de este año busco ser parte de la selección”.
La también estudiante de Comunicación está enfocada ahora en el torneo de primera fuerza que se desarrollará en noviembre próximo, el evento más importante de esta disciplina a nivel nacional.
Me llamó la atención gracias a mis primos que ellos en la escuela estaban entrenando, y me invitaron; al principio no me gustó mucho, pero después le fui agarrando el gusto.
En mi primera competencia en 2011 quedé seleccionada y viajé a la Olimpiada Nacional en Yucatán y de ahí le agarré más el gusto sinceramente a viajar, y al deporte.
Bueno, ahora por la pandemia solo he tenido un torneo en año y medio, pero en 2019 tuve varios eventos muy importantes, donde pude quedar como reserva nacional para los panamericanos para Lima 2019 y quedé también como reserva nacional para los torneos que hubiera en el 2020, pero no los hubo.
Apenas pasó la olimpiada nacional y afortunadamente saqué la medalla de plata en dobles, junto con mi compañera Paola Huerta.
La mayoría de las personas creen que no es un deporte complicado, pero sí lo es, tienes que juntar varias cosas, juntar la mente porque debes de observar los objetos junto con tu cuerpo. Coordinar todo.
Me preparo entrenando completamente, busco tener la mayor cantidad de entrenamientos posibles con mi entrenador y fogueo si es posible.
Ahora no por la pandemia, pero antes sí buscaba tener algunos torneos antes del torneo más importante, y así poder llegar más enganchada.
Ahora que he visto una que otra competencia se me pone la piel chinita al ver a los jugadores ahí, porque, independientemente del resultado que tengan, al estar ahí muestras todos los sacrificios que has puesto.
Entrenar es dejar a un lado a tu familia, amigos, la vida social, es meterte completamente a entrenar de lleno, entonces es increíble para mí. Y sí claro, me encantaría estar, llegar a las olimpiadas.
Pero por el momento quiero ir paso por paso y voy a buscar estar en la selección mexicana para poder ir a mundiales y latinoamericanos o panamericanos representando a México.
La verdad el apoyo es súper importante porque sin mis papás yo no estaría donde estoy, obviamente también con el apoyo de mis entrenadores y de mi equipo, pero mis padres son los primeros que ponen el ladrillo en mi trabajo.
Sin ellos no iría a entrenar, entonces sí es muy importante. Para ellos es un orgullo, sea el resultado que tenga, siempre están orgullosos de mí.