Gracias a las “benditas redes sociales”, las personas se enteran en cuestión de segundos de las noticias buenas o malas y a su vez la respuesta se da a conocer de la misma manera.
Recientemente, se difundió información que muestra algunos errores gramaticales y faltas de ortografía en el contenido de los libros de texto gratuito que el gobierno federal prevé entregar a los estudiantes de nivel primaria en el próximo ciclo escolar.
De acuerdo con publicaciones, de las cuales se desconoce si se trata de los borradores o los textos oficiales, se incluyen palabras como “hicistes”, “dijistes” o frases como “subir para arriba”, “sal para afuera”.
En el texto se señala que, “subir para arriba”, “sal para afuera”, son ejemplo de que a veces en una misma expresión se usan palabras que buscan reforzar o aclarar lo que se dice.
Mientras que en el caso de las palabras que se les agrega una “s”, al parecer es porque las palabras buscan regularizar la forma del pretérito perfecto simple al del resto de los verbos en segunda persona.
“Es importante crear conciencia entre los alumnos sobre el hecho de que las formas de hablar son variadas para evitar juicios por la forma de expresión. Esto va de la mano con reconocer en qué situaciones conviene ajustar o matizar las expresiones (algo que todas las personas hacen)”, se lee en el texto que se incluye en los libros.
Sin embargo, dicho contenido ha generado polémica, pues algunas voces critican que los textos que serán entregados a los estudiantes contengan faltas de ortografía y se desprecie el correcto uso del español.
Hay otros que refieren que en el gobierno federal pretende, por medio de los libros gratuitos, fomentar la militancia y menospreciar a la escuela, que es el principal centro de aprendizaje.
Igual hubo quienes criticaron que se les enseñe a los menores de edad, quienes aún no pueden hacerse un criterio propio, a hablar o escribir de manera incorrecta.
Ante esta polémica, el presidente Andrés Manuel López Obrador defendió el nuevo texto, señalando que hay personas que “quieren que todos hablemos físico”.
Incluso resaltó que México es un mosaico cultural y la lengua tiene que ver con las raíces de las culturas antiguas, pero hay quienes quieren que se enseñe con tecnicismos a los menores de edad y por eso se da la polémica.
En su argumento, mencionó el libro “Así hablan en mi tierra”, de Rosario Gutiérrez, quien destaca la pluralidad que existe en los lenguajes de México.
